Todas las asociaciones de jueces coinciden en que el bloqueo ha laminado la Justicia

La mayoría aprueba la dimisión del presidente e incluso creen que llega tarde

Crisis en el Poder Judicial // Las asociaciones profesionales

La renuncia de Carlos Lesmes como presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) no ha sido acogida de la misma forma por las asociaciones judiciales, que mayoritariamente valoran positivamente. Mientras Jueces y Juezas para la Democracia emplazaba a los vocales a que siguieran el mismo camino que su presidente –por llevar cuatro años en funciones–, otras opinaban que esas dimisiones no iban a contribuir a arreglar un problema cuya solución está en manos de los políticos. Todas coinciden en el daño, desprestigio y deterioro del Poder Judicial que este bloqueo está provocando.

Para María Jesús del Barco, portavoz de la mayoritaria Asociación Profesional de la Magistratura (APM), «una vez que lo había anunciado ya tenía que dimitir» porque quedarse implicaba «contribuir al desprestigio de la institución». A su juicio, la renuncia tenía que haberse producido antes, en concreto en 2021, a raíz de la reforma con la que el Gobierno recortó sus atribuciones impidiéndole hacer nombramientos en el Tribunal Supremo. Opina que hay que renovar con urgencia, tal y como dice Europa y que sea el nuevo Consejo el que afronte los nombramientos pendientes, también los de los dos magistrados del TC que Lesmes quería dejar hechos antes de irse. La APM está de acuerdo en que se cumpla el mandato legal pero no entiende la urgencia cuando aquí los vocales llevan quince días de retraso sobre el plazo que se les dio mientras el Consejo lleva cuatro en funciones.

Desde Francisco de Vitoria, Sergio Oliva, miembro del comité nacional de esta asociación, sostiene que la dimisión de Lesmes «ejemplifica la situación dramática y catastrófica» en la que se encuentra el CGPJ. Antes de conocer el acercamiento de Sánchez y Feijóo, hacía un llamamiento a los grupos parlamentarios para que, «en un acto de generosidad», procedieran a renovarlo sin perder de vista que «Europa nos está mirando» y que hay que cambiar el sistema de elección de los vocales.

Por su parte, para Jueces para la Democracia la renuncia «es la única solución y decisión posible que esperábamos». «No había ni hay otra salida», señalaba ayer el Secretariado de la asociación, que emplazaba además al resto de vocales a seguir el camino del presidente para dejar de dañar la imagen y la dignidad tanto de la justicia como el de un poder al que no representan y al que hace demasiado tiempo que dejaron de servir».

Por último, Foro Judicial Independiente concluyó que aun siendo Lesmes un presidente «nefasto», su renuncia es «incomprensible e inútil» pues no está en sus manos, sino en las de los políticos, la solución a un bloqueo que tanto daño ha hecho.