Feijóo multiplica su presencia en Cataluña para resucitar al PP
El líder de los populares busca el espacio que tuvo Cs y ser referente constitucionalista
Alberto Núñez Feijóo volvió ayer a Barcelona para participar en la primera de las convenciones sectoriales que Génova ha organizado por toda España para armar su futuro programa electoral. En este caso, el acto del PP estuvo centrado en la ‘okupación’, un problema que afecta de manera especial a Cataluña. Feijóo volverá a esta comunidad autónoma mañana, domingo, en concreto a Lérida, en el que será su sexto viaje a Cataluña desde que es presidente nacional del PP.
Prácticamente ha sido un viaje por mes. El 6 de mayo se desplazó por primera vez a Barcelona como líder de los populares, el 1 de julio participó en la Escuela de verano del PP catalán, el 23 de julio clausuró el congreso provincial de Barcelona, el 8 y el 9 de septiembre estuvo en Hospitalet de Llobregat, Tarragona y Barcelona, ayer acudió a la conferencia sectorial de Barcelona y mañana estará en Lérida, en el congreso provincial.
Feijóo solo suele clausurar los congresos regionales del PP, pero con los provinciales catalanes hace una excepción, por la importancia estratégica que los populares dan a una comunidad en la que en las elecciones de 2021 se quedaron con solo tres diputados y 109.000 votos, por detrás de Ciudadanos y de Vox. «Tenemos una capacidad de crecimiento muy potente», avisan en Génova, que espera aprovechar el declive de Ciudadanos para ocupar el espacio de centro constitucionalista. En el equipo de Feijóo no olvidan esos 1,1 millones de votos que ganó el partido de Arrimadas en 2017, y que le hizo ganar las elecciones. Ese es el ‘nicho’ de votos que persiguen.
«Hay mucha gente que está dispuesta a votar a un partido nacional con un discurso valiente que sea alternativa al independentismo. El PSC ha abdicado de esa posibilidad, y el PP tiene una capacidad de crecimiento muy elevada», sostienen fuentes del PP. Para ello, quieren un partido mucho más pegado a la sociedad catalana, que no se sienta ajeno a los símbolos propios de la comunidad, y que plante cara al independentismo sin complejos. El PP de Feijóo pone como ejemplo lo que hizo el actual presidente del partido
Alberto Núñez Feijóo Presidente del PP
«A un okupa no se le desahucia, se le desaloja; okupar no es de derechas o izquierdas, es un delito»
en su tierra: «Ya lo hizo en Galicia, donde también hay independentistas, y les cortó el paso». Su objetivo es que «el PP de Cataluña no sea Génova, sino un partido con acento propio y pegado a la tierra».
Mirar a otro lado
La idea de partido «pegado a la tierra» pasa también, lo recordó ayer Feijóo, por ocuparse de los problemas que preocupan a la gente, y uno de ellos es el de la usurpación ilegal de viviendas, algo que en Cataluña es un fenómeno epidémico, concentrando el 43% de las que se producen cada año en el conjunto de España. Tras desgranar los principales puntos de su proposición de ‘ley antiokupas’ presentada este verano, el líder del PP acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de mirar para otro lado ante esta problemática por la presión de sus socios de Podemos, y a los líderes catalanes de contribuir al efecto llamada con su discurso. «A un okupa no se le desahucia, se le desaloja», zanjó el popular.