La UE prepara una financiación estable para ayudar a sobrevivir a Ucrania
Los europeos dan por muerto el pacto nuclear con Irán tras las nuevas sanciones
Europa pretende establecer un sistema estructurado de ayuda económica a Ucrania que permita sobrevivir a la población a pesar de los constantes ataques rusos contra objetivos civiles. Según explicó la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, después de la reunión del Consejo Europeo de ayer, estas ayudas podrían llegar a los 1.500 millones de euros mensuales y los servicios jurídicos del ejecutivo comunitario estudian si es posible financiar estos fondos con los activos confiscados a Rusia por las sanciones europeas. Según explicó a los líderes europeos el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en una comunicación por videoconferencia, ahora mismo necesitan unos 4.000 millones para garantizar las funciones básicas del Gobierno ante la ofensiva rusa contra las infraestructuras vitales del país.
Los líderes europeos dedicaron una buena parte de su reunión de ayer a analizar la situación de la guerra de Ucrania, incluyendo la ratificación de la decisión de ampliar las sanciones al régimen iraní no solamente por la represión intolerable de las protestas civiles sino por la confirmación de la evidencia de que está suministrando material militar –drones y misiles– a Rusia para su uso en la invasión de Ucrania. Naturalmente, la promulgación de estas nuevas medidas de castigo tienen como consecuencia que la idea de resucitar a corto plazo el viejo acuerdo nuclear con Teherán está, en palabras de una fuente diplomática europea de toda solvencia, «completamente muerta».
Los presidentes europeos dedicaron también una parte de la reunión a perfilar su estrategia respecto a China. La discusión se produjo en condiciones de máxima seguridad y todos los participantes fueron requeridos para dejar fuera de la sala sus respectivos teléfonos móviles. Aunque no se recoge con detalle en el documento de conclusiones, los líderes hablaron de la necesidad de reducir su dependencia tecnológica e industrial respecto a este país al que se considera como un «adversario estratégico». En este sentido, la UE se propone también reforzar su presencia en África y América para competir con las ambiciones de Pekín. Los líderes europeos despidieron al italiano Mario Draghi que ayer participó por última vez en un Consejo Europeo.