Industria cierra la primera convocatoria del Perte del coche eléctrico con el 30% de sus fondos
El Gobierno notificará a partir de la semana que viene el reparto de los 877 millones
Lo que comenzó como un sueño dorado para la recuperación económica después de la pandemia, con anuncios de inversiones milmillonarias que convertirían España en el centro de la electromovilidad del sur Europa, se está convirtiendo en una pesadilla burocrática para todos los implicados. El grupo Volkswagen, de lejos el constructor que ha presentado el proyecto más ambicioso ligado a la concesión de las ayudas nacionales, que articulan los fondos europeos Next Generation EU, amenazó el pasado jueves con cancelar el proyecto de gigafactoría de baterías en Sagunto (Valencia), que supondría una inversión de 3.000 millones y daría empleo directo a 3.000 personas.
Esta fábrica se engloba dentro de su estrategia Future Fast Forward (F3), en la que también participa Seat, que pasa por hacer de España su centro productivo de coches eléctricos pequeños, contando con las plantas de Barcelona y Navarra. En total, habían previsto 10.000 millones y comenzar a ensamblar los coches a partir de mediados de década, momento en el que Sagunto estaría operativa.
La inversión de Volkswagen supondría el mayor importe de la historia industrial de España y ha sido una medalla del Ministerio de Industria desde que se hizo el anuncio oficial. Sin embargo, el ultimátum se produjo en la semana en la que la Comisión de Evaluación del Perte daría el aprobado final a las iniciativas.
Resolución provisional
El Perte VEC está dotado de 2.975 millones de euros, de los cuales 1.425 serán préstamos a un 0% de interés y 10 años de plazo, mientras que los 1.550 restantes, serán subvenciones.
En agosto, se publicó una resolución provisional de los 13 proyectos que se acogieron a la convocatoria. De estos, 10 fueron aprobados, con un total de 702,7 millones de euros, un 23% del total. Poco después, Ford anunció que se quedaba fuera de la convocatoria al no poder acometer sus inversiones antes del 30 de junio de 2025, límite temporal para usar los fondos.
Así, las tres mayores beneficiadas de los números tentativos de agosto fueron el grupo Volkswagen, con 167,3 millones; Mercedes-Benz, con 159,3 millones y el ‘hub’ de reindustrialización de Nissan Barcelona, liderado por QEV Technologies, con 105,1 millones.
Teniendo en cuenta que el antiguo CEO del grupo Volkswagen, Herbert
Diess, había solicitado al Gobierno mil millones para alentar su inversión, recibir una décima parte fuera de los plazos originalmente previstos no ha sido bien visto desde Alemania y la compañía espera poder contar con unos 300 o 400 millones en la resolución definitiva.
A repartir 877 millones
Industria ya sabe cuánto va a recibir cada proyecto. En la presentación del Perte Naval en Vigo el pasado viernes, la titular de la cartera, Reyes Maroto, afirmó que la primera convocatoria del Perte VEC contaría con 877 millones, 175 más de lo previsto originalmente en la resolución provisional, informa Natalia Sequeiro desde Santigao. El reparto de estos se notificará a partir de la próxima semana a cada agrupación beneficiaria, momento en el que tendrán que presentar los avales correspondientes y se prevé que reciban el 90% de la ayuda total por adelantado antes del final de año.
Esta cantidad supone el 30% de los 2.975 millones con los que cuenta el mecanismo, sin embargo Maroto se mostró tranquilizadora: «El resto del dinero se volcará en una segunda línea del Perte, que incluso podrá dotarse de más recursos». Esta nueva convocatoria se abrirá cuando haya finalizado la primera, previsiblemente a lo largo del primer trimestre de 2023.
Esto permitiría que tengan acceso a los fondos proyectos que no cumplieron con los requisitos, ya fueran formales o temporales, de las bases publicadas en mayo de 2022. Ejemplos son Ford Almusafes, la fábrica de baterías de Envision en Navalmoral de la Mata (Cáceres) o un proyecto de Stellantis confidencial al que también optan otros países europeos y que garantizaría el futuro de la planta de Vigo los próximos 10 años. «No podemos hablar aún de ello, pero estamos reforzando los incentivos para que llegue a España y en donde sumen las autonomías seremos capaces de apalancar más recursos y ser más competitivos», sentenció Maroto, que recriminó a la Xunta de Galicia limitarse a reprochar al Gobierno nacional y exigió que «pasaran de las palabras a los hechos y propusieran cuál es el apoyo que darán al proyecto de Stellantis».
El fabricante franco-italo-americano, el tercero más grande del mundo por volumen de producción, confirmó el pasado viernes 14 que modernizaría una de las líneas de montaje de su planta en Figueruelas (Zaragoza) para recibir un nuevo modelo eléctrico, previsiblemente el nuevo Lancia Ypsilon o el Peugeot 208. Esto es consecuencia de acogerse al Perte, del que la fábrica gallega solo recibirá 15 millones.
Otras líneas de apoyo a la automoción del Gobierno hasta la fecha son el Plan Moves III, que ha movilizado 626 millones; el Moves Singulares (364 millones); el programa tecnológico de movilidad sostenible (40 millones), el Moves Flotas (50 millones) o la implantación de IA en la cadena de valor (45 millones). Entre todos y el Perte, superan los 2.000 millones.