El PSOE endurece la ‘ley trans’ al exigir a los menores de 16 años el permiso del juez
Unidas Podemos responde a su socio de gobierno uniéndose a Bildu y ERC para regular los alquileres
Los pilares del Gobierno se resienten de nuevo por la ‘ley trans’, el elemento que genera los conflictos más graves en la coalición. El PSOE registrará el lunes enmiendas que endurecen el texto de Igualdad al plantear que los menores de 16 necesiten permiso del juez para cambiar su sexo en documentos oficiales como el DNI. El PSOE se salta su compromiso de no modificar nada relativo a la autodeterminación de género, clave de bóveda de la ley de Unidas Podemos, porque ahora proponen un texto más restrictivo.
La ‘ley trans’ de Montero permite que los menores de los 12 años a los 14 requieran de un permiso judicial para el cambio registral. Pero que de los 14 años a los 16 baste con tener el permiso de los padres o tutores legales para proceder al cambio. El PSOE considera que los menores quedarían desprotegidos y proponen restringirlo hasta los 16 para lograr una norma más «garantista». Sostienen que antes «carecen del suficiente grado de madurez».
Fuentes del PSOE explican que la ley se situará entre «las más avanzadas» de Europa pese a los cambios que plantean porque se sigue reconociendo la libre autodeterminación de género a partir de los 16 años y permitiendo el cambio registral desde los 12.
La enmienda modifica el artículo 38 de la ‘ley trans’ según se aprobó en el Consejo de Ministros y cuya redacción tal como está superó el debate de totalidad en el Congreso el 6 de octubre. El PSOE también quiere hacer más restrictiva la parte relativa a la reversibilidad exigiendo «aprobación judicial» para un segundo cambio de sexo.
Ferraz quiere darle al texto «más garantías jurídicas» y «proteger a los menores» mientras insisten en que sigue siendo «avanzado»
Debate complicado en Ferraz
Los cambios del PSOE llegan después de semanas de crisis y discusión intensa dentro del partido por el choque entre dos facciones feministas enfrentadas por la ley. Por un lado, la liderada por la exvicepresidenta Carmen Calvo y otras feministas históricas como Amelia Valcárcel, miembro del Consejo de Estado, o Lidia Falcón, líder del Partido Feminista, que son críticas con los postulados de Unidas Podemos. Frente a ellas, el encabezado por el secretario de LGTB del PSOE, Víctor Gutiérrez, o Carla Antonelli, primera parlamentaria trans, activista e histórica dirigente socialista, que rompió el carnet de militante por los retrasos en la tramitación de la ‘ley trans’ que estaba apoyando el PSOE. El endurecimiento que plantea el Grupo Parlamentario Socialista del artículo 38 demuestra que las primeras se han impuesto a los segundos. No es un detalle menor recordar que por primera vez en la historia el feminismo asistió dividido a la manifestación del 8-M de este año precisamente por el conflicto con la ‘ley trans’.
No obstante, el PSOE ha intentado con estas enmiendas alcanzar un punto medio que sea aceptado por Unidas Podemos y satisfactorio para el sector feminista que demoniza el texto y presiona para que no se apruebe así. Fuentes de Igualdad explican que no van a reaccionar hasta que las enmiendas del PSOE estén oficialmente registradas el lunes. De todas formas, Unidas Podemos ya lleva semanas advirtiendo
«Violencia intragénero»
Los socialistas consideran que el término “violencia intragénero” del artículo 65 de la ley difumina la violencia de género y machista al equipararla a la violencia entre parejas del mismo sexo. Proponen en su lugar introducir «violencia en el ámbito familiar».
Otros aspectos
También propone que las mujeres trans en situación de prostitución tengan derecho a recursos de la ley de garantía integral de la libertad sexual, ayudas a personas transexuales en el mundo rural por exilio por discriminación, lo que llaman «sexilio», o mayor promoción del «turismo LGTBI», entre otros. que no permitirán ningún cambio en el texto que salió del Consejo de Ministros y mucho menos uno que suponga un menoscabo de este.
La ampliación del plazo para presentar enmiendas evidenció ya la semana y a todas luces el debate interno tan complicado que se vivía en el PSOE. Con la primera prórroga aprobada en la mesa del Congreso, Carla Antonelli anunció que abandonaba la militancia del PSOE. Al margen de la autodeterminación, los socialistas también modifican el artículo 65 que plantea el concepto de «violencia intragénero» de Igualdad, en referencia a la violencia entre parejas homosexuales.
Ferraz considera que el término difumina la violencia de género y machista al equipararla a la violencia entre parejas del mismo sexo. Proponen en su lugar introducir «violencia en el ámbito familiar». Pero Unidas Podemos se niega porque considera que esa fórmula es muy similar a la terminología que utiliza Vox cuando niegan que exista la «violencia de género».
A las pocas horas de conocerse las intenciones del PSOE con la ‘ley trans’, Unidas Podemos respondía a su socio de Gobierno uniéndose a Bildu y ERC para presionar y enmendar los Presupuestos para limitar los alquileres, informa Juan Casillas. Los socialistas dejaron fuera del proyecto de ley cuestiones relativas a la ley de Vivienda, pero sus socios buscan blindarlas en las cuentas públicas. Una y otra negociación no están ligadas, pero supone un elemento más de estrés que contribuirá a elevar la atmósfera de tensión.