Feijóo rechaza que la Constitución se pueda proteger «por partes»
Defiende que rompió el pacto del CGPJ al ver que el Gobierno quería «debilitar» al Estado
El pacto por la justicia entre PP y PSOE saltó el pasado jueves por los aires una vez los populares constataron el doble juego de Pedro Sánchez, y en ningún caso por culpa del primer partido de la oposición. Es el mensaje en el que ayer, desde Lugo, insistió Alberto Núñez Feijóo, quien cargó con intensidad contra el presidente del Gobierno y le dejó advertencias contundentes como esta: «El orden constitucional no se protege a plazos o por partes, no es compatible con aprobar una ley para profundizar en la independencia del Poder Judicial y, después, pactar un Código Penal con aquellos que no están dispuestos a cumplir la ley».
Feijóo, quien estuvo arropado por su sucesor en la Xunta, Alfonso Rueda,
en la tradicional ‘pulpada’ del PP de Lugo, remarcó que «por mucho que lo intenten, nadie podrá culpar al PP de los problemas y las incoherencias que suponen presidir un Gobierno Frankenstein». En todo momento transmitió que no les quedó más remedio que suspender el pacto por el CGPJ. Estaban, explicó, dispuestos a «asumir el desgaste de ayudar a un Gobierno en descomposición, para que no se desgaste España», y se abrió un diálogo para «fortalecer nuestras instituciones»; de la misma forma, terció, «suspendimos las negociaciones cuando tuvimos la constancia de que el Gobierno quería debilitar nuestras instituciones».
Incidió el jefe de la oposición en que cuando Sánchez —a quien achacó «concesiones inaceptables» para aprobar los Presupuestos y no tener «ningún límite» ni «freno» para «negociar su supervivencia»— «confirmó su intención de adaptar el Código Penal a las exigencias de sus socios», se «demostró» que «alguien nos estaba mintiendo» en las negociaciones. «Puso todas las cartas sobre la mesa y dijo que quería proteger el Estado de Derecho con una mano y desprotegerlo con la otra». Y esto es tan incompatible como intentar pactar tanto fortalecer la Constitución y como promover su debilidad; tanto reforzar la independencia judicial como hacer un «Código Penal a la carta», promover indultos y preparar el «terreno» para que sigan cometiendo «delitos graves contra el Estado».
En su larga diatriba, Feijóo llegó a señalar que Sánchez no solo pacta con radicales e independentistas por supervivencia, sino que «probablemente obedece, además, a una decisión personal»: prefiere aliarse con aquellos a hacerlo con el «constitucionalismo». El PP, por su parte, «está en el mismo momento y en el mismo tiempo donde ha estado siempre, en la defensa de la igualdad de derechos y en la defensa de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley». Con «otro PSOE», insistió, volverán «los pactos de Estado que España necesita».