Deberían advertir
Escribo esta carta para denunciar que, en el teatro de la Comedia de Madrid, gestionado por el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música de España (Inaem), dependiente del Ministerio de Cultura y Deporte, por la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) se está representando la obra de teatro ‘El burlador de Sevilla’ en una versión adaptada, de fuerte contenido sexual, sin advertir de ello a los espectadores.
En efecto, acudí a ver ‘El burlador de Sevilla’, atribuido al eminente dramaturgo Tirso de Molina. Había comprado las entradas con la ilusión de disfrutar, en el bonito teatro de la Comedia, de una obra en verso del Barroco español, típica de esta época del año en que se celebran las fiestas de Todos los Santos y de todos los Fieles Difuntos. Pero, por desgracia, la ilusión se vino abajo nada más sentarme en la butaca y comenzar a leer el programa, lleno de alusiones sexuales, preludio de lo que vendría después con la representación de la obra. Para mi sorpresa y desagrado, el actor principal, Don Juan, se mostró al público, al inicio y al final de la representación, completamente desnudo. No quedó eso ahí, pues en diversos momentos de la representación aparecieron escenas subidas de tono y gestos obscenos de muy mal gusto. Todo ello a pesar de que entre el público había menores de edad. Esto hizo que lo que iba a ser un bonito plan cultural se convirtiera en una experiencia muy desagradable.
Sería deseable y exigible que el Inaem y la CNTC advirtieran claramente de que en la obra de teatro van a aparecer desnudos integrales y escenas y gestos obscenos, para que el publico pueda, al menos, tener la oportunidad de decidir no comprar las entradas, o si llevar a sus hijos o no.