La Junta presiona al Gobierno para evitar el fracaso del Imserso
Bernal exige que revise el plan ante la huida de hoteles por el déficit que les supone
El Imserso mueve a miles de personas mayores cada año ayudando a que tengan alegrías nada menores. Pero cada vez está más complicado encontrar hoteles que quieran ceder sus habitaciones a este plan que nació en 1985. Sólo 25 hoteles andaluces se han apuntado a este año a la primera campaña de noviembre y diciembre. Como publicó hace una semana ABC, los empresarios huyen despavoridos porque participar cada vez les resulta más oneroso: apenas sube la asignación que reciben por parte del Gobierno central y por culpa de la galopante inflación y el alza de costes de la energía, los gastos se han disparado en los últimos tiempos.
El consejero de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Arturo Bernal, se posicionó ayer claramente en el lado de los dueños de hoteles que demandan mayores recursos. «Ya no les encaja. Los costes superan al precio. Y no podemos exigir a las empresas que trabajen en punto muerto de manera permanente», afirmó a preguntas de este periódico.
Los 25 hoteles apuntados para estos meses es la menor cifra que se ha dado en los últimos tiempos —el año pasado fueron 35 y antes del Covid no se bajaba de los 40— y ha dejado incluso algunas provincias sin cubrir.
Por ello Bernal apretó al Ejecutivo de Pedro Sánchez para que revise el precio que paga por el programa. El hotel que está adherido al mismo va a recibir 23,50 euros por persona en régimen de pensión completa. Los hoteleros con los que habló ABC explicaron que resulta del todo «inviable» prestar el servicio por ese precio. Si ya lo empezaba a ser antes de la pandemia y de que la inflación se disparara por encima del 10%, ahora con un incremento superior al 280% de las facturas energéticas o del 40% de los alimentos es imposible no sólo sacar rentabilidad a estos viajeros sino quedarse en un umbral de escasa pérdida.
Hay que tener en cuenta que no se
El consejero está dispuesto incluso a estudiar alguna vía para que la Junta pueda ayudar a hacer rentable a los empresarios participar
trata sólo de ocupar una habitación. El programa requiere un servicio completo de alojamiento, comidas, médicos, conexiones a internet, animación y comodidades en un mercado que tiene el precio medio de la habitación en Andalucía por encima de los 70 euros por persona y noche. Así las cosas, hay hoteleros que cifran en once euros por persona y noche la pérdida que han de soportar. Algo inviable.
Por eso, además de apuntar directamente al Ministerio de Políticas Sociales, responsable del plan, al que le pidió que «recapacite», Bernal exigió también a Industria, Comercio y Turismo que ayude. Tiene algunas conversaciones «pendientes» con el Ministerio y ahí entrará el Imserso. «Es un programa que nos interesa, porque no sólo favorece el turismo; también es bueno para la sociedad», reflexionó.
Ayuda de la Junta
El titular de Turismo incluso se mostró dispuesto a valorar, junto a la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad la posibilidad de que la Junta pudiera colaborar para hacer más rentable a los empresarios su participación en este plan. «Aún no lo hemos hemos valorado pero podemos plantearlo en el Consejo de Gobierno», señaló. En algunas localidades turísticas que están viendo cómo se cierran hoteles que no van a participar en este plan han apuntado a la posibilidad de que la administración autonómica ayudara.
Arturo Bernal recordó cómo además de los beneficios sociales que supone mover a personas que, por su situación económica, no podrían viajar de otra forma, el Imserso también ha sido muy favorable para mantener la industria hotelera abierta en los meses más complicados del año, como es el invierno. Romper, en la medida de lo posible, con la temida estacionalidad que trufa de hoteles cerrados el litoral andaluz cada año.
En Andalucía, este año habrá en las dos temporadas del Imserso 170.000 billetes disponibles. Además, habrá 130.000 andaluces que se adhieran al programa para viajar durante los meses de inverno.