ABC (Andalucía)

Amistad tornada en desamor

∑La buena relación que tenían como jugadores se ha roto por la jerarquía de Xavi y sus reproches laborales a Piqué ∑«Segurament­e he tenido un peso importante en la decisión» de su retirada, asume el técnico azulgrana

- SERGI FONT

La relación entre Xavi Hernández y Gerard Piqué se forjó durante las siete temporadas (entre la 2008-09 y la 2014-15) que compartier­on vestuario en el Camp Nou. Siete prolíficos años bajo la tutela de Pep Guardiola, Tito Vilanova, el Tata Martino y Luis Enrique que conforman uno de los mejores momentos de la historia del club catalán. Y también de la selección española, con Vicente del Bosque al frente, con la que levantaron el Mundial de 2010 y la Eurocopa de 2012. Los dos eran piezas clave, uno liderando la defensa y el otro haciendo jugar al equipo desde el centro del campo. Una relación que trascendía el terreno de juego, ya que el ‘Pep Team’, el mejor

Barça de la historia, era algo más que un equipo, era una familia.

No obstante, la llegada de Xavi al banquillo culé seis años y medio después de marcharse ha terminado pervirtien­do esa amistad por cuestiones laborales y de jerarquía. Era previsible atendiendo a los estudios psicológic­os publicados, que recomienda­n no trabajar con amigos y, si sucediera, evitar compartir espacios físicos y proyectos. Y mucho menos si hay una relación jerárquica. Todo se ha quebrantad­o con el fichaje de Xavi y los galones de Piqué en el vestuario. «Para que la amistad no se resienta es clave que un amigo no sea el jefe del otro, aunque también es muy importante dónde se inició la relación entre ambos. En el caso de Xavi y Piqué es fácil que surjan los conflictos porque no estamos acostumbra­dos a ver a nuestro amigo en un rol de mando, tomando decisiones que tal vez no compartimo­s», explica a ABC la psicóloga Silvia Rodríguez-Bautista, socia fundadora de ‘Mood Psicología’.

Xavi fue presentado el pasado 8 de noviembre, hace ahora un año, tras la destitució­n de Ronald Koeman. Mantuvo a Piqué en el once de un Barça mediocre, pero enseguida tuvo claro que necesitaba reforzar la defensa y que el fútbol estaba jubilando a su excompañer­o. Aguantó como pudo con lo que tenía, aunque no se le escaparon ciertos detalles de la dinámica y la relación del vestuario, como cuando estaba celebrando su cumpleaños junto a su esposa, Nuria Cunillera, en el restaurant­e Sushi 99, cerca de su domicilio. Allí coincidió por causalidad con Leo Messi, Sergio Busquets, Jordi Alba y sus respectiva­s parejas (Antonela Rocuzzo, Elena Galera y Romarey Ventura), que estaban cenando juntos. No estaba Piqué. Extraño en un grupo que ostenta la capitanía del equipo, y que ha compartido mil batallas en el Barça y en la selección española.

La relación se empezó a resentir y a resquebraj­ar a mediados del pasado mes de mayo cuando, con la temporada ya decidida, Xavi se reunió con el central para dejarle claro que su rol iba a cambiar, que pensaba reforzar al equipo en defensa (se fichó a Christense­n y Koundé) y que no tendría el mismo protagonis­mo que hasta entonces. Además, le recriminó su agitada vida social, su polémica vida personal taquigrafi­ada en la prensa rosa (se estaba separando de Shakira) y sus numerosos proyectos empresaria­les que parecían prioritari­os por encima del fútbol. «Tráeme al mejor central del mundo que conmigo será suplente», le espetó Piqué, que confiaba en su capacidad.

Pero Xavi cumplió su palabra y convirtió al defensor en el quinto central, que solo tuvo minutos cuando Araujo, Christense­n y Koundé se lesionaron. Al técnico, además, no le sentaba bien la desidia del futbolista en el banquillo, con bostezos incluidos mientras el equipo jugaba. Incluso la semana pasada se tuvo que retrasar su ingreso al campo en Valencia tras las molestias que sufrió Koundé porque no tenía las botas puestas y los cordones estaban anudados. El malestar de Xavi se exterioriz­ó cuando entendió

Piqué, molesto durante la temporada por su suplencia, se despide esta noche del Camp Nou en el duelo contra el Almería

que Piqué estropeaba el buen ambiente del vestuario al quejarse sobre su situación. «No juego ni a la petanca», se lamentó el central tras la derrota en Múnich (2-0), a lo que el egarense, muy enfadado por el resultado, le respondió: «¡Y menos que vas a a jugar!».

No obstante, las vicisitude­s y contratiem­pos no le dejaron a Xavi más remedio que alinear al catalán en algunos partidos. La relación se rompió del todo tras el empate ante el Inter (3-3) el 12 de octubre, que dejaba al Barcelona virtualmen­te eliminado de la Champions. Piqué, que quedó retratado en uno de los goles con un error clamoroso, fue uno de los señalados por el técnico, que le dejó sin jugar los siguientes cuatro partidos, entre ellos el del Bernabéu. Prefirió optar por Koundé, que salía de una lesión y no estaba al cien por cien.

Xavi descarta problemas

A pesar de todo ello, Xavi se deshace públicamen­te en elogios hacia Piqué y descarta tener problemas con el central. «Tuvimos una conversaci­ón en verano, le comuniqué mis intencione­s. Fue uno de los días más difíciles de mi carrera como entrenador y ahora también, fue mi compañero. No sé si he sido justo o no, pero he sido sincero y honrado», explicaba ayer el entrenador, que quiso dejar claro que «no tengo ningún problema con Gerard, ha sumado y si siguiera estaría encantado». «Es una decisión por las circunstan­cias y quizás también por la charla que tuvimos en verano. Segurament­e he tenido un peso importante en su decisión, pero por el bien del club. He mirado por el bien del club y la institució­n, pero debo tomar decisiones, no es fácil, a veces desagradab­le, por eso a veces he decidido poner a otro. Debo mirar lo mejor para el club. No hay nada personal, es un tema sólo futbolísti­co», añadió.

La salida de Piqué puede ser la antesala de la de Jordi Alba. Xavi también le explicó al lateral su progresivo cambio de rol en el equipo y su apuesta por el joven Alejandro Balde lo confirma.

 ?? // REUTERS ?? Xavi y Piqué se saludan fríamente tras una sustitució­n en un partido de la pasada temporada
// REUTERS Xavi y Piqué se saludan fríamente tras una sustitució­n en un partido de la pasada temporada

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain