LAS CLAVES DE LA COP27
se ha dado una gran catástrofe en Pakistán. Ha habido olas de calor inéditas en Europa, llegando por primera vez a los 40 grados en el Reino Unido. O el huracán Ian, uno de los más intensos y destructivos que ha visto el estado de Florida (EE.UU.). Todos son eventos facilitados o intensificados por el cambio climático, según estudios de atribución.
Por ello, el año pasado, en la Cumbre del Clima de Glasgow (Escocia), los países se comprometieron a «revisar y fortalecer» en 2022 sus planes de recortes de emisiones. El objetivo era mantener al alcance las metas del Acuerdo de París: un planeta a 1,5 grados o, al menos, por debajo de 2 grados para evitar los peores impactos del cambio climático. Tan solo 24 países han mejorado sus planes. Se espera que durante la cumbre algunos estados más se sumen y permitan mantener vivo el objetivo más ambicioso de París. Pero, según reconoce la ONU, la ventana de oportunidad se está cerrando y ya solo un cambio radical permitiría lograrlo.
Pobres expectativas
No ha sido el mejor año para la lucha contra el cambio climático. «No hay gran cosa que esperar de la COP», opinaba crudamente hace unos días el expresidente francés, François Hollande. «Tenemos unas crisis interconectadas, que interactúan y nos llevan a una cumbre geopolíticamente muy complicada, sin duda», opina Lázaro.
La tensión entre China y Estados Unidos, las elecciones de mitad de mandato en EE.UU., los intereses gasísticos de Rusia, la guerra de Ucrania y la crisis energética son un telón de fondo que ya ha tenido consecuencias. Ha dinamitado el grupo de trabajo conjunto en cambio climático entre los dos principales emisores, por ejemplo. Además, la cumbre de 2021 incluyó por primera vez un llamamiento a reducir el uso del carbón y los subsidios a los combustibles fósiles. Ni un año después, en el contexto de la guerra de Ucrania, países de la UE han reactivado centrales de carbón o subvencionado combustibles fósiles.
¿Qué es la COP27?
La conferencia internacional sobre el cambio climático, popularmente llamada COP, es la gran cita anual de Naciones Unidas para combatir el cambio climático. Dura dos semanas en las que se dan cita casi 200 países. Este año, la conferencia 27 se celebra en Sharm el Sheij (Egipto).
¿Cuál es el objetivo?
En la COP21 los países firmaron el conocido como ‘Acuerdo de París’, por el que se comprometían a intentar mantener el planeta en
1,5 ºC sobre el nivel preindustrial, o al menos, a dejarlo por debajo de los 2 ºC para evitar los peores impactos del clima en forma de olas de calor extremas, subida del nivel del mar o lluvias torrenciales.
¿Se está consiguiendo?
El resultado de estas cumbres nunca es blanco o negro. Por ejemplo, se está aportando financiación anual de 83.300 millones al año a los países en desarrollo, pero no llega a los 100.000 millones que se habían prometido. Además, aunque las proyecciones de emisiones están bajando, todavía sitúan el planeta a unos 2,5º en 2100.
Fuentes de la Oficina de Cambio Climático de España reconocen que la crisis energética ha obligado a la UE a tomar medidas especiales, aunque las definen como coyunturales. Sin haber actualizado sus planes de recortes de emisiones, los Veintisiete llevarán a la cumbre el ‘manual de instrucciones’ de su transición. Y, mientras, la coyuntura ha impulsado a algunos países africanos a pedir que se les reconozca su derecho a desarrollar sus reservas de combustibles fósiles.