Miguel Carrero
Presidente de Previsión Sanitaria Nacional (PSN) «Veo muy mal el atentado permanente que están sufriendo los planes de ahorro individuales»
Miguel Carrero (Santiago de Compostela, 1941) ha vivido todo el proceso de consolidación del sistema público de pensiones en España y ahora ve con «preocupación» el futuro a medio plazo de la Seguridad Social. Asegura que los problemas de nuestro país no están solo en lo económico, que se están retrocediendo pasos en la cultura del esfuerzo y la meritocracia. Y lamenta profundamente que se estén socavando parte de las libertades individuales que logró su generación años atrás.
—¿Cómo ve la coyuntura económica?
—En el momento actual hay una crisis económica galopante y sin contención. A mi entender no se están adoptando medidas realmente eficaces y necesarias. Y hay una cosa clara, la riqueza no se genera espontáneamente. En España la riqueza la crean fundamentalmente desde el autónomo hasta la pequeña y mediana empresa. En nuestro país las grandes empresas son prácticamente una anécdota. Este factor de la economía es el que hay que reforzar porque es la base de la riqueza, riqueza que se pueda compartir y generar empleo. Si no, lo que nos queda es repartir la escasez y la pobreza.
—¿Cómo valora el trato de este Gobierno hacia las empresas?
—El tejido productivo de nuestro país está muy dañado. En ocasiones atacado y abocado al cierre. Entre las últimas genialidades que se le han ocurrido a algunos miembros del Gobierno está el intento de topar los precios de la cesta de la compra, intervención de la economía de terribles consecuencias y precedentes. Eso supondría cerrar empresas, reducir su producción y fomentar el estraperlo, con encarecimiento de los productos. En pocas palabras, desabastecimiento como en Venezuela. La destrucción de tejido productivo de este país será muy difícil de recuperar.
Como impresión generalizada, diría que lo peor que se está haciendo es tomar decisiones en base a los votos. Es necesario pensar en los ciudadanos, ayudar, crear buenas condiciones y fomentar la creación de tejido productivo, de riqueza, de trabajo y empleo, si no hay riqueza no hay nada que repartir. Cuando los impuestos son gestionados por una administración ineficiente y derrochona, se destinan recursos a ciertos chiringuitos administrativos y políticos, que han proliferado en los últimos años, un tejido improductivo que desvía y consume recursos muy necesarios.
—Al menos está ahí la llegada de los fondos europeos.
—Hay una verdadera incapacidad para gestionar los fondos europeos. El hecho de que haya una partida y que la mayoría de dinero se quede en el limbo por la incapacidad de ejecutar y tramitar proyectos es un problema. Y, sin embargo, tenemos muchos más funcionarios por habitante que cualquier otro país de nuestro entorno. Falta organización, dirección y compromiso por parte de los dirigentes. El dinero de los fondos se gestiona con cuentagotas y se desperdiciarán muchas oportunidades y ayudas a muchas empresas y proyectos realmente productivos.
—En cuanto a las medidas que el ministro Escrivá está impulsando en la reforma de pensiones...
—El ministro José Luis Escrivá está en la indefinición, en una nebulosa. No le veo consistencia, hubiera esperado mucho más de él en cuanto a su labor
❝ «Es necesario fomentar la creación de tejido productivo, de riqueza y de empleo. Sin riqueza no hay nada que repartir»
—Veo muy mal el atentado permanente que están sufriendo los planes de pensiones individuales. Es una muestra más de la falta de libertad y de la restricción de la capacidad económica que tiene el individuo, que nos lleva a ser más dependientes de lo público. El autónomo o persona individual que quiera tener un plan de pensiones simplemente porque con la parte pública no le va a llegar para vivir lo tiene ahora más complicado. Nosotros como mutua trabajamos para el colectivo, para los mutualistas y, en ese sentido, hemos conseguido tener unos planes de pensiones que están a la cabeza de los ‘ranking’ de rendimientos para el ahorrador. Los planes de pensiones y sistemas de ahorro son algo imperioso en este país, donde la propiedad privada está en riesgo.