Cultura abre una crisis con los sindicatos al plantear que el Inaem sea una fundación
El cambio de modelo implicaría privatizar puestos de trabajo en el organismo público
Los planes de Cultura para la reforma del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem) pasan por convertir el ente en una fundación pública, una solución que abriría la puerta a la privatización de los nuevos trabajadores. Estos planes han puesto en guardia a todas las centrales sindicales, que ayer solicitaron una reunión urgente con el director general, Joan Francesc Marco, «para aclarar este extremo». Como ya avanzó ABC, Francesc Marco convocó el 3 de octubre a UGT, CC.OO. y
CSIF para informarles de que había reactivado los trabajos de reforma del Inaem, cuatro años después de que todas las partes acordaran dotar al ente de una ley propia, sin que hasta la fecha haya habido novedades. Ahora Cultura quiere actualizar el Inaem, pero el director general no adelantó con qué modelo. Poco antes, el 13 de septiembre, sí había adelantado en un Comité de Dirección a los directores de las unidades artísticas que la vía elegida era la conversión en una fundación pública.
Así consta en el acta de la reunión, a la que ha tenido acceso este diario: «Se plantea crear una fundación pública en la que se insertarían las unidades artísticas del Inaem y una reforma del organigrama del Ministerio de Cultura para crear una dirección general nueva para gestionar los temas de fomento. Se han iniciado trabajos internos con la subsecretaría y el ministro está impulsando
El ministerio apuesta por la vía del real decreto para aprobar la iniciativa antes de que acabe la legislatura, a la que le queda un año
esta posibilidad». El director general informó de que, tras las primeras gestiones realizadas, su idea era abordar la reforma mediante reales decretos para poder aprobarlo antes de que acabe la legislatura, a la que le queda un año. Con una ley no sería posible. Iceta ha reconocido que lo que no vaya al Congreso en diciembre no saldrá adelante.
El objetivo de esta reforma es separar la actividad de las distintas unidades de producción artísticas de la gestión económico-administrativa de las políticas de fomento de las artes escénicas: subvenciones, convenios, tramitación de fondos europeos... Esta parte lleva años provocando verdaderos quebraderos: la dependencia de Hacienda y las ineficiencias del organismo provocan problemas como retrasos en los pagos a los actores o una burocracia insalvable para gestiones que en el sector privado se ejecutan con ligereza.
Considerando que la creación de una fundación «abre la puerta de la privatización» de los trabajadores del Inaem, UGT ha enviado una nota informativa en la que compara este proyecto con el intento del gobierno del PP, en 2018, de integrar el Teatro de la Zarzuela en la Fundación Teatro Real. Según un portavoz del sindicato, con una fundación los trabajadores dejarían de tener la cobertura del convenio único y del estatuto único. CC.OO. también ha calificado estos planes de «enorme retroceso». Modificar el carácter público del ente, asegura este sindicato, «sería un enorme retroceso». Como ejemplo «inaceptable» cita igualmente la fundación que gestiona el Teatro Real, «con entradas de 600 euros imposibles para la gran mayoría de los mortales».