Australia agita la madrugada oceánica
Gana a Dinamarca y se mete en octavos por segunda vez en su historia, tras hacerlo también en 2006
Eran las 03.25 de la madrugada en Melbourne, de un miércoles 1 de diciembre, cuando la moderna ciudad australiana comenzó a temblar. Miles de aficionados de la selección australiana, que en ese momento presenciaban el partido en las pantallas gigantes instaladas en Fed Square, en pleno downtown, alteraron su sueño y el de muchos de los ciudadanos con sus gritos de felicidad, bengalas y botes de humo. Leckie acaba de anotar el gol que, media hora después, metería a su selección en los octavos de final de un Mundial, gesta solo vista una vez en la historia, hace 16 años en el Mundial de Alemania (2006).
Australia consumó ayer en Qatar la primera gran sorpresa del Mundial. Llegó como una de las selecciones más débiles del torneo y ha logrado meterse en los cruces apeando a la que muchos consideraban que iba a ser la gran revelación, Dinamarca. Sufrió una derrota abultada en la primera jornada ante Francia (4-1), pero dejó muy buenas sensaciones y así lo mostró en los partidos ante los norteafricanos y los escandinavos. Dos victorias por la mínima que le han dado el billete entre los 16 mejores equipos del mundo: «Estoy orgulloso y agotado, todo a la vez realmente. Es difícil describir las emociones en este momento. Teníamos nuestras dudas, pero nuestro espíritu, nuestra creencia, nuestra ética del trabajo y lo cerca que estamos como grupo se notó en el campo. Lo celebraremos al máximo esta noche, pero luego habrá que recuperar bien, porque queremos más», reflexionaba Leckie, el héroe ‘aussie’.
La selección oceánica hizo un partido perfecto. Contuvo en todo momento a los daneses y aprovechó su mejor ocasión para anotar el tanto que hizo la diferencia ante Dinamarca, cuyo Mundial ha sido una absoluta decepción. Los escandinavos se marchan de Qatar como últimos de su grupo, con un solo punto y con un solo gol a su favor. Clasificados para la final four de la Nations League y semifinalista en la Eurocopa del pasado verano, el combinado liderado por Eriksen fue una sombra de lo que había mostrado en el último año y medio.
Ahora, Australia solo tiene tres días para preparar su duelo de octavos de final contra Argentina (sábado, 20.00 horas) y sumar un nuevo hito a su humilde historia. En el Mundial de Ale