El Barça recibe su propia medicina
▶ Se enfada ahora por el interés del PSG en Messi después de años tanteando a Neymar y otros jugadores
No encaja bien el Barcelona los guiños que le lanzan a Leo Messi desde París. Ni el hecho de que la normativa permita a cualquier club negociar con un futbolista al que le queda menos de seis meses de contrato apacigua los ánimos en la entidad catalana, que considera inaceptable que quieran birlarle a su estrella. Instalado en su atalaya moral, el Barcelona se toma como una ofensa las declaraciones que llegan desde el PSG, sin tener en cuenta que el propio Messi no ha atajado los rumores porque asegura que aún no sabe dónde jugará el próximo año y que hasta final de temporada no decidirá su futuro. El burofax que envió el pasado mes de agosto exigiendo su liberación abrió la caja de Pandora y ahora el club azulgrana se encuentra con la horma de su zapato, sufriendo la estrategia que durante los últimos años ha empleado para tratar de fichar a los jugadores que pretendía.
La última ofensa, según el Barça, ha sido la portada de ‘France Football’, con un fotomontaje de Messi vestido del PSG, olvidando el centenar de primeras planas que la prensa catalana ha dedicado en estos últimos tiempos al regreso de Neymar al Camp Nou. La paja en el ojo ajeno, tras los cánticos de sirena que le susurran en el oído a Messi desde París, impide ver la viga en el propio, que también molestó a los galos con el fallido intento de convencer a jugadores con contrato en vigor como David Luiz, Thiago Silva, Marquinhos, Rabiot, Di María, Verratti o Neymar.
Koeman, retratado
Mauricio Pochettino ha salido al paso de la portada del prestigioso semanario francés. «Estamos hablando de una revista que no tiene nada que ver con el PSG. Aquí no hay ningún tipo de situación controvertida que se haya planteado desde el club. En ningún momento se ha faltado el respeto. Entendemos que los jugadores pueden decir lo que quieran, pueden hablar de compañeros de otros equipos. Aquí tenemos un respeto total por todos los clubes», apuntaba el argentino. No obstante, otros homólogos suyos, como Rudi García, han sido más críticos. «He leído que Ronald Koeman estaba un poco ofendido de que el PSG hablara de Leo Messi antes de la eliminatoria de la Champions contra el Barcelona. Él no tuvo timidez
El PSG no negocia
Nasser Al-Khelaïfi, presidente del PSG, ni siquiera levantaba el teléfono cuando llamaba el Barcelona, interesado en fichar a David Luiz, Thiago Silva, Marquinhos, Rabiot o Verratti. No cedió a las presiones e incluso amenazó con tocar a las estrellas culés.
El fichaje de Neymar
Golpe en la línea de flotación culé con el fichaje de Neymar, por el que pagaron sin pestañear los 222 millones se su cláusula de rescisión. El Barça aún no se ha recuperado.
El regalo de Bartomeu
Nadie entendió que Rafinha se marchara al PSG, club que también le había quitado a Xavi Simons, su gran perla canterana por tres millones en variables. El Barça trató de recuperar a Neymar sin éxito durante dos años seguidos. para hablar de Memphis Depay incluso después del mercado de fichajes. A eso le llamo yo regar sobre mojado», acusó el técnico del Lyon.
No tardó el francés en recibir el correctivo de Koeman. «Quiere tener protagonismo en la prensa, para mí no es importante», se retuvo el holandés, que sí se había pronunciado sobre las declaraciones de Leonardo («Messi siempre estará en la lista del PSG»), Di María («Hay muchas posibilidades de que venga a París) o Verratti («Jugar con Messi sería otro regalo que me daría el fútbol»). «Es una falta de respeto, están calentando el partido de Champions»,
se quejó Koeman, que recibió el apoyo público de todos los candidatos a la presidencia del club. Ander Herrera dio el contrapunto en la Ser: «Si estuviera en el Barça no me haría gracia pero no es una falta de respeto porque en el fútbol los jugadores están en boca de todos y es normal».