Miles de pequeños ahorradores, atrapados en el concurso de Abengoa
▶Más de 3.000 accionistas minoritarios están en la plataforma AbengoaShares, que lucha por el control de la compañía «He perdido 24.000 euros con Abengoa» «Compré acciones pensando en la jubilación»
La noticia conocida esta semana de que la matriz de Abengoa había solicitado el concurso no es más que la crónica de una quiebra anunciada. Desde 2015, la multinacional líder en energías renovables estaba bloqueada por falta de liquidez. En 2017 firmó un plan de refinanciación para los acreedores, que supuso 8.000 millones de euros en quitas y capitalizaciones, y una reducción y posterior ampliación de capital que hizo perder a los accionistas más del
90% de su inversión.
En marzo de 2017, el ‘pool’ de bancos que se quedó con la mayoría de las acciones puso en venta millones de títulos, lo que fue aprovechado por muchos pequeños ahorradores españoles para comprar, aunque la situación hizo que la cotización se desplomara aún más. El accionariado quedó atomizado, sin grandes grupos que dominaran el capital social. Ese plan, sin embargo, no logró salvar a la compañía y en 2019 firmó otro plan de refinanciación que apenas le dio oxígeno para unos meses. Para entonces, la mayoría de activos y negocio de la matriz se habían transferido a Abenewco1, dejando vacía Abengoa S.A. En 2020 Gonzalo Urquijo, su presidente, planteó otro rescate que hacía desaparecer prácticamente a los accionistas de la matriz, diluyéndolos en un 2,7% de la filial Abenewco1. Además, permitía a acreedores como el Santander o el fondo KKR controlar la compañía mediante quitas y la conversión de deuda en acciones de Abenewco1. La compañía creyó que con un accionariado tan atomizado podía seguir adelante con su tercer rescate. Lo que no nunca pensó fue que una pequeña plataforma de accionistas bautizada como AbengoaShares, iba a usar las nuevas tecnologías, y más concretamente Telegram, para reunir a pequeños accionistas de toda España, indignados con lo que estaba ocurriendo. Entre ellos hay policías, funcionarios, ingenieros, pequeños empresarios, abogados... que no quieren dar por perdida su inversión. Muchos incluso están dispuestos a ir a una ampliación de capital. Aunque dentro de esa plataforma hay quienes tienen más de 100.000 euros en acciones en su mayoría son profesionales y familias que invirtieron parte de sus ahorros –entre 2.000 y 30.000 euros– en Abengoa. El desplome de la cotización de Abengoa ha dejado casi a cero sus inversiones y muchos de ellos confiesan que ni siquiera se atreven a contarlo a sus familias porque eran los ahorros de toda su vida. «A alguno incluso le ha costado el divorcio», dicen.
La plataforma estuvo primero liderada por Antonio Gabriel Gómez Bueno, apodado en las redes sociales Laska, que propuso a Marcos de Quinto para el asalto al consejo. Según los minoritarios, Laska había trabajado antes para Abengoa. La junta de noviembre fue ganada por los minoritarios, que destituyeron a Urquijo pero De Quinto se retiró de la lucha por la presidencia de Abengoa, apoyando
Este fisioterapeuta que vive en Talavera de la Reina no gana más de 30.000 euros anuales. «El poco dinero que lograba ahorrar lo invertí en Abengoa. Estoy en un callejón sin salida. Invertí 28.000 euros y mis acciones no valen ahora ni 4.000 euros. Aún así, sigo creyendo que Abengoa tiene futuro» el plan de presidente destituido, lo que fue considerado una «traición» por AbengoaShares. El 16 de diciembre de 2020, la plataforma se rompió y tomó el testigo de Laska una joven leonesa de 36 años, Eva Rodríguez Blanco. «Estuve 72 horas trabajando sin parar para recomponer todo el grupo porque se había caído todo y había que buscar soluciones
Manuel explota una tintorería en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) y tiene 62 años. «Aconsejado por un amigo que trabajaba en Abengoa, compré en 2017 acciones pensando en mi jubilación. Nunca creí que los bancos iban a desangrar a la compañía con intereses de usura». muy rápidas», explica Eva. Preparó un equipo de 27 personas para diseñar toda la estrategia de los accionistas minoritarios para tomar el control de la multinacional. «En ese equipo hay abogados, ingenieros... incluso gente que ha trabajado en secretarías de estado con Rajoy y Zapatero». Eva y su equipo crearon más tarde la sindicatu