El desequilibrio de reforzar con Pfizer
La administración de una segunda dosis de Pfizer a las personas menores de 60 años con un pinchazo de AstraZeneca tensionará el calendario de vacunación. Si el Ministerio de Sanidad mantiene su propuesta, cuestionada por nueve comunidades autónomas, casi dos millones de dosis de Pfizer serán inyectadas a otros tantos trabajadores de profesiones esenciales y, por tanto, no las recibirán los siguientes grupos, mientras las vacunas anglosuecas seguirán acumulándose.
La vacunación contra el coronavirus en España hasta ahora está sostenida fundamentalmente por Pfizer. El 70% de las dosis administradas hasta el momento son de esta compañía. La farmacéutica más regular y abundante en sus envíos, Pfizer, actualmente entrega 1,7 millones de dosis a la semana, y en junio se esperan 2,7 millones semanales.
Una entrega semanal iría por tanto destinada exclusivamente a los profesionales esenciales que esperan completar la pauta, mientras que AstraZeneca quedaría relegada en el plan de la protección contra el Covid-19. España ha recibido hasta ahora 5,7 millones de dosis de AstraZeneca, y ha administrado 4,9 millones. Casi dos millones han sido inoculadas a profesionales esenciales, mientras que el resto han sido inyectadas a personas entre 60 y 69 años, actualmente el único grupo de edad que las sigue recibiendo. La estrategia de vacunación no prevé la administración de AstraZeneca a personas menores de 60 años.
Aún faltan 800.000 personas de más de esta edad por recibir el primer pinchazo. Una vez administrada la segunda dosis a las personas entre 60 y 69 años, España habrá empleado 9,3 millones de dosis de AstraZeneca de los 12,2 millones que, según el Ministerio de Sanidad, ha adquirido. Es decir, habrá acumulados tres millones de dosis sin destinatario. Sin descontar la posibilidad de que una parte sea finalmente inoculada como segunda dosis a menores de 60 años, después de firmar un consentimiento informado, como han pedido algunas comunidades autónomas.