La UE logra una primera victoria parcial contra AstraZeneca
▶ La farmacéutica deberá entregar 50 millones de dosis y no 90 como exigía la CE Las dos partes se volverán a ver las caras en septiembre en el juicio sobre el fondo del asunto
diario Sergio Carrasco, abogado experto en temas digitales. «Una evaluación de impacto y un análisis de riesgos se hace para luego desarrollar la aplicación, no cuando ya está disponible para su descarga», sentencia el experto.
La falta de esta evaluación de impacto, contraria a las directrices de la Unión Europea para el desarrollo de las ‘app’ de rastreo, ha terminado desembocando en la apertura de dos procesos sancionadores –uno a la Dirección General de Salud Pública y otro al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital– por parte de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). Entre los demandantes figuran la ONG Rights International Spain, de cuya litigación se ocupa Carrasco, y Pau Enseñat, director ejecutivo de la plataforma centrada en la privacidad Reclamadatos. En el documento enviado por la AEPD a los demandantes, y al que ha tenido acceso ABC, la agencia sostiene que «se aprecian indicios racionales de una posible vulneración de la normativa en materia de protección de datos» durante el desarrollo de la aplicación.
Un juzgado de primera instancia de la ciudad de Bruselas ha decidido obligar a la farmacéutica anglo-sueca AstraZeneca a que entregue 50 millones de dosis de sus vacunas contra el Covid-19 a la Unión Europea antes del 27 de septiembre o de lo contrario deberá pagar una multa de 10 euros por cada dosis no suministrada. La sentencia anunciada ayer tarde satisface a la Comisión Europea, cuya presidenta, Ursula von der Leyen, señaló que los jueces «confirman que AstraZeneca no cumplió con los compromisos que asumió en el contrato». Pero también agrada al laboratorio, que ha visto cómo los jueces reducen el número de dosis que reclamaba la Comisión en su denuncia, lo que interpretan como un reconocimiento de las dificultades que han tenido que superar para fabricarlas.
Según la sentencia, AstraZeneca deberá entregar «urgentemente» 50 millones de dosis con un calendario estricto: 15 millones «antes del 26 de julio a las 09.00 de la mañana, hora de Bruselas», 20 millones de dosis el 23 de agosto y otros 15 millones el 23 de septiembre. Además, «en caso de incumplimiento de estos plazos de entrega, AstraZeneca deberá pagar una penalización de 10 euros por dosis no administrada».
El Ejecutivo comunitario insiste en que la sentencia de este primer proceso contra la farmacéutica dictamina que esta «es responsable de un incumplimiento grave de sus obligaciones contractuales con la Comisión Europea» porque «debería haber desplegado todos sus esfuerzos para entregar las vacunas dentro del calendario acordado, incluidos los sitios de producción británicos mencionados explícitamente en el contrato», que es la base de sus argumentos.
La farmacéutica celebra por su parte que los jueces no han aceptado la petición de la Comisión en sus términos más amplios, ya que en su demanda reclamaban más de 80 millones de dosis y que los diez euros de multa por cada dosis no entregada se acumulasen con cada día de retraso. Por ello interpreta que la sentencia establece que el contrato con el Ejecutivo comunitario no le otorgaba ningún «derecho de exclusividad» sobre su producción de vacunas. El asesor jurídico de AstraZeneca, Jeffrey Pott, dijo que la sentencia les da la razón porque entiende que deja claro que «AstraZeneca cumplió plenamente su acuerdo con la Comisión Europea y a partir de ahora seguiremos centrándonos en la urgente tarea de suministrar una vacuna eficaz, que estamos entregando sin lucro para ayudar a proteger a las personas en Europa y en todo el mundo de la pandemia más mortal en una generación».
Los abogados de la Comisión estiman que la sentencia obligará al laboratorio a acelerar sus suministros de vacunas para los gobiernos europeos porque le conmina a utilizar también para ello el laboratorio de producción del que dispone en territorio británico, mientras que los representantes de AstraZeneca aseguran que no se puede deducir de la sentencia nada más que la entrega de los 50 millones de dosis. De todos modos, las dos partes volverán a enfrentarse ante la justicia en septiembre, cuando se discuta la segunda querella, esta vez sí, sobre el fondo de la discusión y en la que la UE reclama una fuerte compensación económica al laboratorio.