El callejero de Barcelona pierde ahora a los Reyes Católicos
▶ Colau avala un nuevo paso en la depuración de los simbolos de la Historia de España
Enésimo gesto contra todo lo que recuerde a la Historia de España en Barcelona. El callejero de la capital catalana pierde esta semana la calle de los Reyes Católicos, que, según ha sabido ABC, desde este jueves pasará técnicamente a denominarse calle de Elisa Moragas i Badia, en honor a una pedagoga y defensora de los derechos de la infancia. El revisionismo de la Historia, habitual en la capital catalana, llega ahora al siglo XV.
El Gobierno de Ada Colau ha permitido el rebautizo de esta calle del barrio de Vallvidrera, que fue impulsado por una plataforma popular hace unos dos años. Entonces, los vecinos de la zona tramitaron una iniciativa ciudadana para fraguar el cambio de nombre, alegando que el de Reyes Católicos no les representaba porque había sido impuesto durante la dictadura de Primo de Rivera. Hasta entonces, la vía había sido conocida como avenida de Canigó. La plataforma ciudadana, conocida como ‘Canviem Reis Catòlics’, contó con más de 1.000 apoyos iniciales y en la fase final de la iniciativa, más de 300 personas participaron en la votación para decidir la alternativa final, en una consulta que también proponía, entre otros, el nombre de Manuel Vázquez Montalbán, que fue vecino del barrio.
Avalado por el consistorio
Ya más adelante, con los primeros pasos consolidados, la iniciativa entró en el Ayuntamiento y el consejo plenario del distrito de Sarrià-Sant Gervasi acabó avalando el cambio de nombre, con los votos a favor de BComú, ERC, PSC y Junts y a pesar del posicionamiento contrario del resto de formaciones, Cs, BCN Canvi y PP, que una vez más reprocharon que desde el Gobierno de Ada Colau se fomente la depuración de símbolos y que una vez más, el nomenclátor de Barcelona se haya puesto al servicio de la ideología. «La única intención es eliminar la Historia del callejero de la ciudad», recordaba el concejal del PP, Óscar Ramírez.
Los cambios en el callejero de Barcelona, a veces con fiestas convocadas para celebrarlos, se han convertido en uno de los recursos más utilizados desde que Ada Colau ganara la alcaldía en mayo de 2015. El cambio del salón de plenos Reina Regente por el del alcalde republicano Pi i Sunyer fue uno de los primeros cambios al poco de asumir la alcaldía, a los que le siguió la desaparición en el Nomenclátor de las plazas Juan Carlos I y de la Hispanidad, las avenidas Príncipe de Asturias y Borbón, y los jardines Príncipe de Gerona y de las Infantas. También perdió su calle uno de los héroes de Cuba, el amirante Cervera, según la alcadesa Colau, un «facha».