Crisis pediátrica: los niños sufrirán más
Las personas vulnerables –como los niños, las minorías étnicas y personas de edad avanzada, así como las comunidades más pobres y personas con otras patologías preexistentes– sufrirán más las consecuencias de la crisis climática y de salud. Lo advierte Enver Hasanoglu, de la Asociación Internacional de Pediatría: «La crisis climática es una crisis de salud infantil». sequías, incendios forestales, todo empeorado debido a nuestra inversión continua en combustibles fósiles que están calentando al planeta a un ritmo alarmante», advierte David Barbe, presidente de la Asociación Médica Mundial en el artículo. Porque, tal y como señala Eric J. Rubin, editor jefe de ‘The New England Journal of Medicine’, uno de los coautores del editorial, el medioambiente y la salud están íntimamente entrelazados. «Como profesionales médicos y de salud pública tenemos la obligación no solo de anticiparnos a las nuevas necesidades de atención médica, sino también de ser participantes activos para limitar las causas de la crisis climática».
El editorial se publica antes de la Asamblea General de la ONU, previa a la Cumbre del Clima (COP26) que tendrá lugar en Glasgow (Reino Unido) en noviembre. Se trata de un momento crucial para instar a los países a presentar planes climáticos ambiciosos para cumplir los objetivos del Acuerdo de París.
Medidas insuficientes
El editorial advierte de que, si bien los objetivos recientes para reducir las emisiones y conservar la naturaleza son bienvenidos, no son suficientes y deben combinarse con planes verosímiles a corto y largo plazo: instan a los gobiernos a rediseñar los sistemas de transporte, las ciudades, la producción y la distribución de alimentos, los mercados para inversiones financieras y los sistemas de salud. Dichas inversiones producirán enormes beneficios, incluida la creación de empleos de alta calidad, la reducción de la polución, el aumento de la actividad física y la mejora de las viviendas, así como de la nutrición.
Una mejor calidad del aire por sí sola generaría beneficios en la salud que compensarían fácilmente los costes mundiales de la reducción de las emisiones. «Los riesgos que plantea el cambio climático podrían empequeñecer los de cualquier enfermedad», dice el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreysus, que sigue: «La pandemia de Covid terminará, pero no existe una vacuna contra la crisis climática. En términos de calentamiento, cada fracción de un grado más pone en peligro nuestro futuro». Fiona Godlee, editora de ‘The BMJ’, señala que los profesionales de la salud se unen para advertir que superar los 1,5 ° y permitir la destrucción continua del medioambiente provocará la próxima crisis, que será mucho más mortal. «2021 tiene que ser el año en el que el mundo cambie de rumbo, nuestra salud depende de ello».