El papá, la niña y el cohete
Hijo y nieto de dictadores, Kim Jong-un decidió presentar en público a una hija, de la que no se tenía conocimiento oficial, durante la prueba del misil balístico intercontinental (ICBM) realizada el pasado viernes. La agencia estatal de noticias KCNA se limitó a informar de que Kim «supervisó en persona» el lanzamiento «junto con su querida hija y esposa», la primera dama norcoreana, Ri Sol-ju, sin ofrecer más detalles sobre la hija, como por ejemplo su nombre o edad. La niña aparecía en cinco fotos de la veintena que compusieron el álbum gráfico de la enésima prueba misilística del dictador de Pyongyang, que no hay semana en la que no exhiba los ingenios balísticos con los que trata de amenazar a Occidente y a sus vecinos asiáticos. Enfundada en un abrigo blanco y escuchando a su padre mientras da órdenes a los artilleros, contemplando desde la distancia el misil en su fase de despegue o caminando como cualquier padre que pasea de la mano de su niña... pero en vez de por un parque junto a la lanzadera del misil.