China, sin vacuna contra la protesta
Con cifras inéditas de contagios desde la irrupción de la pandemia y una larga cadena de cierres perimetrales que afectan ya a varias ciudades, el régimen chino ha ordenado el confinamiento de seis millones de personas en la ciudad de Zhengzhou, polo industrial en el que ha estallado la chispa de la protesta. Los trabajadores de una planta de la compañía Foxconn, la mayor fábrica de iPhones del mundo, se enfrentaron a la Policía tras meses de encierro y deserciones laborales. Desde que se detectó el primer caso de Covid en la megafactoría, en la que trabajan decenas de miles de personas, los empleados fueron hacinados en naves, con la promesa, incumplida, de ver incrementado su sueldo. La política de ‘Covid cero’ provoca agotamiento, y ruina.