Un inmigrante murió en suelo español en la tragedia de Melilla
La investigación de un consorcio periodístico pone en duda la versión de Interior, que niega esa muerte
Nuevas pruebas visuales pondrían contra las cuerdas al ministro del Interior al cuestionar la versión oficial sobre la tragedia de Melilla que sostiene desde hace meses. Fernando Grande-Marlaska ha negado reiteradamente la responsabilidad del Gobierno español en esa avalancha de inmigrantes a la valla, que se saldó con al menos 23 muertos y decenas de heridos el 24 de junio. Según el ministro, ninguno de esos inmigrantes pereció en suelo español y defendió el dispositivo de las Fuerzas de Seguridad en la frontera para hacer frente a esa entrada masiva.
Hace unos días, un vídeo desvelado por la agencia Colpisa, del grupo Vocento, confirmó que la trágica avalancha llegó a suelo español, donde también actuaron agentes marroquíes. Un informe de la BBC también desmintió a Marlaska al considerar probado que sí hubo muertes en el lado español.
Ahora, es un consorcio periodístico internacional el que incide en lo mismo. Esta nueva investigación vio la luz ayer y según sus autores evidencia la brutalidad con la que las autoridades de España y Marruecos reaccionaron a la avalancha en ambos lados de la frontera. Realizada por Lighthouse Reports, es una investigación conjunta de ‘El País’, ‘Le Monde’, ‘The Independent’ y ‘Der Spiegel’.
Tras el visionado de vídeos inéditos y entrevistas con 40 testigos –incluidos agentes de las Fuerzas de Seguridad no identificados–, se reconstruye el puesto fronterizo del Barrio Chino. A partir de ahí, se asegura que el asalto a la valla fue consecuencia de las redadas de la Policía marroquí en los montes en los que se escondían los inmigrantes y que estos mismos agentes utilizaron gran cantidad de gases lacrimógenos en un recinto sin vía de escape.
Se hace, además, una tercera afirmación: un vídeo filmado por un helicóptero de la Guardia Civil que muestra el momento crucial de la estampida evidencia cómo la gente queda plastada en territorio español una vez se abre la puerta a la fuerza, y, según se asegura, es ahí cuando al menos una persona muere. «Es probable que estén casi todos [los muertos] ahí [en el lado español]», confiesa un anónimo agente español a los citados medios.
Quince minutos después, la Guardia Civil insiste en que se centró en contener a la gente. Pero uno de los supervivientes asegura que continuaron gaseándoles hasta que abrieron la puerta para pasarles «de uno a uno al lado marroquí» con las manos atadas. Al mismo tiempo, en el vídeo se vería cómo los inmigrantes que se habían quedado atrapados detrás de la puerta, en el lado marroquí, «eran aplastados y golpeados» por agentes de ese país.
Pero Interior insiste, una vez más, en que «el trabajo de la Guardia Civil no tuvo ninguna incidencia en los fallecimientos, y ninguna muerte tuvo lugar en territorio nacional».