Díaz, contra la reforma de Escrivá: «Supone un recorte de derechos»
Las propuestas del ministro Escrivá para cerrar la reforma de pensiones y presentar los cambios completos a Bruselas han sacudido al Gobierno de coalición y puesto en pie de guerra a los agentes sociales. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, alertó ayer de que aumentar los años que se tienen en cuenta para calcular la pensión supondría «un endurecimiento» del acceso a las prestaciones por jubilación y lamentó que las políticas que defiende el titular de la Seguridad Social vayan en contra de «la recuperación de derechos» en la que lleva años trabajando su equipo.
«El periodo de cálculo de las pensiones en España estaba inicialmente en los ocho años, después se extendió a 15 y posteriormente a 25 años», recuerda la responsable de Trabajo, para la que extender de nuevo este periodo sería «contraproducente».
Los sindicatos siempre se han opuesto a cualquier medida de recorte, como es el caso de esa ampliación de los años porque, en la práctica, supone una merma en la prestación, al contabilizarse años de menores ingresos. CC.OO. recordó ayer que las propuestas del titular de la Seguridad Social están alejadas de los planteamientos sindicales e insistió en «la necesidad de incrementar la intensidad de las medidas relacionadas con la mejora de los ingresos», al considerar que el aumento progresivo de las bases máximas de cotización planteado en el diálogo social no basta para abordar el fuerte incremento de gasto que experimentará el sistema en los próximos años.
UGT, por su parte, echó en falta «una propuesta hilada» para poder negociar sin ver necesario aumentar el periodo de cómputo, al menos no sin contrapartidas, explicó el sindicato. Los planteamientos de reforma de Escrivá cuentan con la oposición frontal de
la organización empresarial que dirige Antonio Garamendi por el aumento de los costes añadidos que implicará para las empresas, en un momento en el que la mayoría del tejido empresarial no se ha respuesto de la crisis sanitaria.
La patronal ha alertado de que las cotizaciones sociales son ya más altas en España que en el resto de los países de Europa y augura con el nuevo hachazo del ministro en las cotizaciones daños para el empleo. La ruptura de la patronal con el Gobierno es un hecho en esta reforma, en la que las posibilidades de acuerdo son nulas después de la sucesión de subidas de impuestos al empleo planteadas.