Animales de compañía
Espero conocer cuáles van a ser las exigencias reales que nos imponga a los dueños de mascotas la nueva Ley de Bienestar Animal. Para empezar, creo que se nos estigmatiza porque la norma parte de la presunción de que los dueños maltratamos. En esos casos la ley debe ser inflexible, de acuerdo. Pero el marasmo administrativo que nos amenaza, con controles tan exhaustivos que hará muy difícil pensarse tener mascota, dibuja un escenario de perreras repletas, por ejemplo. O sea, otro efecto no deseado.
JAIME ORTIZ TOLEDO