El valor de la firma

Hay que dudar de todo, sin temer nada. Crear opinión. Y ganarnos el respeto de fuentes y lectores

Periodista por vocación, devoción y convicción. Son las tres máximas que siempre he utilizado para definir mi pasión por una profesión que solo se puede vivir desde una absoluta entrega y plena responsabilidad. La que te concede ser consciente de la trascendencia de nuestra información. Transmitir la verdad de los hechos desde el profundo conocimiento de las circunstancias que los condicionan. Y cuanto mejor los contemos, mayor será el compromiso con la sociedad a la que nos debemos.

Hay que dudar de todo, sin temer nada. Crear opinión. Fomentar la crítica. Y, sobre todo, ganarnos el respeto de fuentes y lectores, generar confianza y un valor asociado a un nombre. Nuestra firma. La marca que da la autenticidad al periodismo bien entendido y ejercido. ¿Así que quieres ser periodista? «No hay otro camino. Y nunca lo hubo».