La Justicia iraní anuncia que ejecutará «en breve» a algunos de los detenidos en las protestas
El presidente del Tribunal Supremo de Irán afirmó ayer que se han confirmado las condenas a muerte de varios manifestantes y que serán ejecutados en breve.
Gholam-Hossein Mohseni Ejei declaró que la judicatura y los organismos de seguridad se ocuparán sin demora de los «alborotadores». Ejei expresó además que los manifestantes condenados a muerte serían ejecutados en breve. No está claro si a los presos condenados formalmente les queda algún derecho de apelación.
El uso por parte de Irán de la pena de muerte para los manifestantes ha sido duramente criticado por Naciones Unidas, mientras que algunos países y muchos grupos de derechos humanos también han condenado la medida.
Según Amnistía Internacional, al menos 28 presos se enfrentan actualmente a la ejecución por participar en las manifestaciones, entre ellos tres menores.
Mientras tanto, la Guardia Revolucionaria emitió un comunicado para elogiar la decisión del poder judicial instándole a emitir con decisión veredictos contra «los acusados de delitos contra la seguridad de la nación y el islam».
«Las fuerzas de seguridad, inteligencia, orden público y movilización del país no dudarán en enfrentarse con decisión a los alborotadores, los matones y los terroristas contratados por el enemigo», dijo la agencia de noticias Tasnim citando a la Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI).
Los partidarios de la línea dura, dirigidos por el CGRI, califican a los manifestantes de «alborotadores» y «matones».
Las amenazas de la judicatura y el CGRI se producen en medio de huelgas nacionales de trabajadores y empresas para derrocar al régimen clerical. Muchos creen que lo que se pretende con ellas es asustar a los manifestantes para que detengan las movilizaciones para derrocar al régimen.
En lo que va de año, han sido ejecutadas en Irán más de 500 personas.