Muere una anciana estrangulada a manos de su marido en Ávila
▶ El presunto asesino, de 82 años, está hospitalizado tras intentar suicidarse
El hombre contactó con su hijo y éste con un tercer familiar que se desplazó a la vivienda, donde ella yacía muerta y él, herido
Una mujer de 81 años murió ayer presuntamente asfixiada por su también anciano marido, de 82, en la casa que ambos compartían en la zona de Pedro Sancho de la capital abulense, donde el supuesto asesino trató de ahorcarse aunque fue auxiliado por los medios desplazados hasta el lugar al tener conocimiento del crimen por parte de un familiar.
La alerta saltó pasada la medianoche cuando una llamada informaba a la Policía Nacional de que en la citada vivienda, ubicada en la calle Francisco de Nebrera de la ciudad de Ávila, había una persona fallecida y otra herida.
El aviso partía del yerno de ambos ancianos. A él le habría telefoneado el hijo del matrimonio, que vive en Madrid y con quien su padre se habría puesto en contacto instantes antes. Tras hablar con su progenitor dio el aviso a esta tercera persona que acudió al lugar de los hechos y avisó a la Policía. A su llegada, las dotaciones desplazadas no pudieron más que confirmar que la mujer de 81 años yacía sin vida.
La autopsia confirmó horas más tarde que la anciana habría fallecido en su vivienda tras haber sido estrangulada, según explicó la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, que ha activado el protocolo que se aplica en casos de violencia de género.
Los facultativos desplazados al lugar no pudieron hacer nada por salvarle a ella y atendieron ‘in situ’ a su supuesto verdugo. Su esposo se encontraba en otra habitación, grave, tras haberse intentado quitar la vida infructuosamente. Estaba en el suelo con evidencias de haberse intentado ahorcar, pero la «soga se había soltado», explicaron fuentes oficiales. Tras una primera asistencia fue trasladado al Hospital, donde se recupera estable, consciente y detenido.
No constan denuncias previas contra el supuesto asesino por parte de la que fuera su mujer, que es la segunda víctima de violencia de género en lo que va de año en Castilla y León, tras el dramático crimen de Paloma de 46 años y su hija India, de 8, el pasado mes de enero en la capital vallisoletana a manos del novio de la madre. El número de féminas que ha muerto a manos de sus parejas o ex en España asciende ya a 13 en los cuatro primeros meses del año y a 1.197 desde 2003.
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el líder de la oposición, Luis Tudanca, condenaron ayer en el pleno de las Cortes el fatal suceso. Así, el popular trasladó su «cariño y pésame» a la familia por «un asesinato por violencia de género, un crimen machista más en nuestra Comunidad», mientras el socialista llamó a «seguir batallando contra la violencia machista hasta que desaparezca de nuestra tierra» tras un crimen que es, dijo, «la demostración de que la violencia de género existe», informa Ical.
El Obispado de Ávila mostró su «más profunda tristeza» y rechazó «toda forma de violencia contra las mujeres. Ninguna institución, ningún colectivo, ningún ciudadano debe cerrar los ojos ante esta lacra social, que lesiona gravemente el nivel moral de todo nuestro pueblo». Desde el Ayuntamiento de Ávila trasladaron también sus condolencias a familiares y amigos y convocaron tras el suceso a la ciudadanía a una concentración silenciosa que tuvo lugar por la noche en plaza del Mercado Chico. A esta concentración le sucederán otras tantas este mediodía ante distintas administraciones como el minuto de silencio que se guardará este miércoles en todas las subdelegaciones de Gobierno.