EL CÓRDOBA CF SUMA OPTIMISMO
Cuarta victoria consecutiva en el feudo de un rival directo como el Nástic (1-2) con goles de Aythami y Guardiola que ponen a cuatro puntos la permanencia
Lo que hace un mes parecía un milagro ahora es una posibilidad muy real. El Córdoba ganó anoche al Nástic (0-2), un rival directísimo en la lucha por la permanencia, con goles de Aythami y Sergi Guardiola. Enlaza la cuarta victoria consecutiva y deja la salvación a solo cuatro puntos (la tenía a 13 hace cuatro jornadas) con 11 partidos (33 puntos en juego) por delante.
Hay cuatro nombres fundamentales en el vestuario para esta transformación. Ayer volvieron a demostrarlo con creces. Son Sandoval, Reyes, Aythami y Sergi Guardiola. El técnico ha convencido a todo el mundo de que se podía y lo está demostrando. Su lectura de los partidos ha sido fundamental. Toma decisiones acertadas. Ayer lo bordó de nuevo con los cambios. Reyes ejecutó la tercera asistencia del gol del triunfo en tres partidos. Aythami es el líder de todo. Atrás ha hecho del equipo una roca y arriba anotó su segundo gol que da un triunfo. De Sergi Guardiola sobran las palabras. Son 19 goles esta temporada y ayer sentenció en un partido en el que no parecía fino.
El Córdoba volvió a ser superior al rival. Lo fue en la primera parte con el control del balón y un Reyes estelar hasta que se marchó tocado ya con 01. En la segunda mitad se replegó y aguantó sin conceder demasiadas ocasiones a un rival que empujó de lo lindo. Los cambios apuntalaron el equilibrio donde lo necesitaba (por el medio y en la banda izquierda) y sentenció a la contra. El triunfo da un espaldarazo definitivo. Ya no quedan pesimistas entre el cordobesismo. El Córdoba ha dado motivos para creer y ahora tiene tiempo suficiente para recortar lo que le queda hasta la salvación.
El Córdoba partió en Tarragona con la sorpresa de Reyes (por Alfaro) en el equipo titular por primera vez. El sevillano fue el eje del equipo en los 39 minutos que duró en el campo por unas molestias musculares.
Fue superior el bloque cordobesista en la primera mitad, que empezó con el susto de una chilena de Pleguezuelo que despejó Kieszek (minuto 9). A partir de ahí, el Córdoba fue un rodillo ante un Nástic atenazado. Probó fortuna Narváez antes de que el árbitro perdonase la segunda amarilla (min. 17) a Javi Márquez por un clarísimo agarrón a Reyes.
Para entonces, el sevillano ya se había hecho amo y señor del duelo. Lo intentó con un tiro directo de falta (min 17). Loureiro también estuvo muy activo en ataque. En dos ocasiones puso en aprietos a Dimitrievski con disparos con la izquierda (min. 23). Fue el preludio del tanto. Casi calcado a la acción del 1-2 en Alcorcón y con idénticos protagonistas. Reyes colgó una falta lateral y Aythami, al límite del fuera de juego, cabeceó cruzado en el segundo poste para adelantar a los blanquiverdes (01, min. 25).
A partir de ahí, el Córdoba convirtió el partido en un monólogo. El Nástic, el segundo peor local de la categoría, notó el golpe. Se vino atrás. De hecho, Reyes tuvo dos opciones para aumentar la renta, especialmente con un remate en el área (min. 32).
Sin embargo, ahí comenzaron las molestias musculares de Reyes en el aductor, que acabó sustituido. Entró Alfaro en su lugar (min. 39). Ese tiempo lo aprovechó el Nástic para intimidar antes del intermedio. Primero con un disparo alto de Fali (min. 35). Luego, con un gol anulado a Kakabadze por fuera de juego inexistente previo de Barreiro en la asistencia. El georgiano se marcó un jugadón ante la pasividad alarmante de los cordobesistas (min. 41). Con todo, Loureiro, otra vez sensacional, advirtió al final de la primera mitad que el Córdoba no se había ido del encuentro con un tiro desde la frontal (min. 44). El Nástic salió en tromba en la segunda mitad, ya con la entrada de Tejera por Javi Márquez, que se jugó la expulsión. Fruto de ese dominio y ese riesgo, Manu Barreiro (min. 50) remató al larguero en la mejor y casi única ocasión de los catalanes en la segunda mitad. El bloque tarraconense porfió siempre por su derecha, con Kakabadze sensacional. Ahí sufrían Galán, que vio la primera amarilla, y Juanjo Narváez.
Ante el agobio y a pesar de que no se traducía en grandes ocasiones del rival, Sandoval introdujo a Vallejo (m. 60) por Jovanovic para apuntalar el equilibrio del pivote. Al Córdoba le costaba salir a la contra, pero siempre que lo hacía buscaba las botas del colombiano y lanzó al equipo en ataque.
El juego de movimientos obligó al Nástic a jugársela con Dimitru y Uche en el último cuarto de hora. Sandoval contestó afianzando el lateral izquierdo con Fernández (min. 76), subiendo a Galán y tirando a Narváez al medio y Alfaro a la derecha. Así volvió a respirar el equipo a la contra.
Eso sí, antes se llevó dos sustos importantes pero sin ver siquiera portería. Primero, un cabezazo de Barreiro desviado en una salida dudosa de Kieszek (min. 81). Luego, en un zapatazo de Dimitru que desvió el polaco.
El Córdoba estaba atrincherado y esperaba su opción al contragolpe. Le llegó. Guardiola y Alfaro fabricaron una pared que el delantero, en línea, fusiló a Dimitrievski (0-2, min. 85). Un alegrón que no limitó la evitable expulsión de Galán (min. 92).
Clave El árbitro no perjudicó al conjunto blanquiverde en dos goles al límite del fuera de juego y anuló otro al Nástic que era legal Clasificación El Córdoba deja la permanencia a cuatro puntos a falta de 11 jornadas y 33 puntos en juego
Números Aythami ya lleva dos goles decisivos y Sergi Guardiola llega a las 19 dianas esta temporada
Sandoval Apuntaló al equipo atrás con Vallejo y Fernández para sentenciar a la contra y suma 12 de 15 puntos