El G-20 elude criticar el proteccionismo de Donald Trump
Román Escolano insistió en la cumbre en el riesgo de las criptomonedas
La preocupación de España es la angustia compartida del resto de los países miembros del G-20 a excepción de Estados Unidos. Al menos, a efectos de la sacudida que ha provocado la Administración de Donald Trump con la fiebre arancelaria que tiene al mundo en estado, si no de shock, sí frente a un golpe traumático difícil de encajar.
El ministro de Economía, Román Escolano, lo expresó en términos contundentes: «Rechazamos cualquier escalada proteccionista». Sus palabras, idénticas a las de sus homólogos (salvo el estadounidense), tuvieron la callada por respuesta en las conclusiones del foro. El documento final no hizo mención alguna a un fenómeno que el G-20 critica históricamente.
En la segunda y última reunión ministerial del G-20, el sucesor de Luis de Guindos se estrenó en estos foros con un desafío no menor: explicar los acuerdos que no lo son –o lo son a medias–, ofrecer una imagen de la Unión Europea unida contra las tempestades de Trump y sólida, pese a las grietas, ante el desafío de hacer tributar a la economía digital. En el mismo reto. El ministro se esforzó en dar a conocer, entre otras cosas, los riesgos de las criptomonedas. De este último debate quedó excluida de la discusión, a título particular, el «petro», el invento de moneda fantasma creado por la inteligencia del régimen de Nicolás Maduro.
Precauciones
«Los consumidores finales deben adoptar precauciones y evitar riesgos», insistió Román Escolano. En este contexto anunció que se plantearon «propuestas de cambios legislativos» y añadió un tema en paralelo, «España comparte la prioridad de la tributación de la economía digital a nivel global y europeo». Dicho esto, evitó mencionar la resistencia de los virtuales paraísos fiscales dentro de la Unión Europea como Irlanda, Luxemburgo, Holanda, Malta, Gibraltar y otros territorios de la UE cuyas arcas engordan a costa del resto de mundo.
«Las sociedades entienden que la financiación debe realizarse por todos los agentes económicos» incluida, «la nueva economía» que conlleva otra cadena de valor. Dicho de otro modo, «es un problema de justicia distributiva». El documento final lo explicó con guante de seda: «Estamos desarrollando un entendimiento común de la naturaleza de los cambios y de sus potenciales implicaciones… Acordamos desarrollar un abanico de opciones de políticas públicas».
Paraísos fiscales «España comparte la prioridad de la tributación de la economía digital a nivel global y europeo»