Powell se estrena al frente de la Fed con un alza de tipos del 0,25%
El presidente de la Reserva Federal sube los intereses hasta el 1,75% y avanza dos aumentos más en 2018
Sin sorpresas. Exactamente lo que esperaban los mercados. Un guión que estaba escrito desde el mismo día en el que fue nombrado como sucesor de Janet Yellen al frente de la Reserva Federal de Estados Unidos. De la que, en principio, sigue su estela. Así, el nuevo presidente de la autoridad monetaria norteamericana, Jerome Powell, se estrenó ayer en el cargo con la decisión de subir los tipos de interés por primera vez en lo que va de año. Un 0,25% más, que los deja en una horquilla de entre un 1,5% y un 1,75%, en la que es el sexto incremento del precio del dinero desde 2015.
Además, Powell quiso dejar constancia de la que seguirá siendo la estrategia al frente de la Fed –que responde a la revisión al alza de las perspectivas de las perspectivas de crecimiento económico– y avanzaba tres próximos incrementos a lo largo de 2018. Y es que la Fed calcula ahora que el PIB se elevará un 2,7% este año y un 2,4% en 2019, por encima del 2,5% y el 2,1%, respectivamente, que había previsto hace tres meses.
Las previsiones de la autoridad monetaria norteamericana también reflejan su intención de elevar el ritmo de subida de tipos en 2019 y 2020 por encima de lo que el organismo había previsto en diciembre.
El Comité del Mercado Abierto de la Fed informó al término de su reunión que el mercado de trabajo de EE.UU. ha continuado reforzándose desde enero y que la actividad económica ha continuado creciendo de forma «moderada», aunque se ha notado una desaceleración de la inversión familiar y comercial en el primer trimestre del año, mientras que consideró que la inflación se situará entorno al objetivo del 2% a medio plazo.
En concreto, el banco central americano decidió no hacer cambios en la previsión de que la inflación cierre 2018 en el 1,9% y alcance el objetivo del 2% un año más tarde. Mientras, la tasa de desempleo queda fijada en el 3,8% en 2018, y en el 3,6% en los dos años siguientes, mejor de lo previsto a finales de 2017.
Por todo ello, la institución, si bien subía ese 0,25% el precio del dinero, aseguraba que era una decisión por mantener la política monetaria en una situación «acomodaticia».
Reacción bursátil
Disipado ya el temor que provocó su llegada y que hizo derrumbar los mercados a principios de febrero –muchos pensaron entonces que Powell sería más agresivo que Yellen en sus decisiones, y se comportaría más como un «halcón» que como una «paloma» –en el sinuoso lenguaje de la política monetaria–, la reacción del mercado esta vez fue más suave y, de hecho, animó a los inversores de la renta variable.
Tras conocerse el comunicado, los principales índices de Wall Street subían entre un 0,3% y un 0,6%, y la rentabilidad de los bonos a 10 años repuntaban también ligeramente, hasta superar el 2,91%, lejos aún del 3%.
Situación «acomodaticia» La Fed basa su decisión en la revisión al alza de las perspectivas de crecimiento económico