El crimen de los sanfermines de 2008
El asesino de Nagore ya está en libertad condicional y puede ejercer la Psiquiatría Aunque Yllanes ya puede trabajar en lo privado, el veto al empleo público y su pena acaban en 2020
Diego Yllanes, el hombre que mató de una forma salvaje a Nagore Lafagge en los sanfermines de 2008, ya no duerme en prisión. Condenado a doce años y medio de cárcel por un delito de homicidio, Yllanes ha accedido ya a la libertad condicional, la última fase de su condena, que se cumplirá en 2020. Según ha podido saber ABC, la titular del juzgado de vigilancia penitenciaria número 2 de Madrid, Mercedes Fernández Faraldo, le concedió el acceso a esta fase el pasado 7 de marzo. La decisión, tras no ser recurrida por la Fiscalía, se convirtió en firme el 16, hace justo una semana, han informado a ABC fuentes jurídicas.
A pesar de este paso, el homicida de Nagore sigue vetado para ejercer su pro- fesión, la Psiquatría, en la sanidad pública hasta 2020, cuando se cumple su condena y se extinguirán todas sus penas. Yllanes fue condenado por la Audiencia de Provincial de Navarra como responsable de un delito de homicidio, con la circunstancia agravante de abuso de superioridad, y las atenuantes de reparación (su familia abonó la responsabilidad civil) y de intoxicación etílica. El tribunal que enjuició el brutal crimen también le prohibió acercarse a los padres y el hermano de Nagore, y le impuso la inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena, lo que le impide trabajar en su especialidad, la Psiquiatría, en lo público. Todas estas penas se desvanecerán en 2020.
El crimen sucedió la primera noche de las fiestas de los sanfermines, en la madrugada del 7 de julio. Cuando volvía a su domicilio, el condenado se encontró con Nagore, una enfermera de 20 años a la que conocía de la Clínica Universitaria de Navarra, donde él realizaba la especialidad de Psiquatría como médico residente. La sentencia de la Audiencia de Navarra relata que, tras besarse de mutuo acuerdo en el ascensor y subir al domicilio de Yllanes, que entonces tenía 27 años, éste desnudó «de manera violenta» a la chica.
Al desvestirla bruscamente, Nagore interpretó que Yllanes le estaba agrediendo sexualmente, y le amenazó con denunciarle y «destruirle la carrera», dice la resolución judicial, fechada el 17 de noviembre de 2009. Ahí brotó lo peor de Yllanes y se cometió el crimen. «La reacción airada de Diego Yllanes consistió en taparle la boca, para evitar que gritara, y en golpear de manera deliberada y repetida a Nagore Lafagge». Le causó 38 heridas por todo el cuerpo, después la mató, estrangulándola, y trató de descuartizarla, para poder hacer desaparecer el cuerpo.
La libertad condicional significa que Yllanes ya no tiene que volver a dormir cada noche al Centro de Inserción Social (CIS) que le corresponde