Política y deporte
Entre unos y otros estamos perdiendo la cultura del deporte, en este caso, la cultura del fútbol. El pasado miércoles se dio primero la noticia del nombramiento para entrenar al Real Madrid de Julen Lopetegui, actualmente era el seleccionador de la Selección Española de Fútbol y al día siguiente era cesado de este organismo de seleccionador de su cargo por el presidente de la AFE. Alfredo Relaño dice: «Este Madrid fabrica antimadridismo». Para mí creo que no es correcto. Resulta que la afición del Real Madrid junto a la de toda España, menos los secesionistas catalanes, vibramos cuando juega la selección de fútbol. El señor del cemento ha hecho muy mal ahora que la selección empezaba el Mundial y sus perspectivas ganadoras parecían que eran muy saludables, por lo memos llegar a la final. Este exceso de autoridad solamente ha hecho nada más que empezar. Si este caso lo hubiese hecho el Barça o el Athletic de Bilbao, ¿díganme que hubiese pasado? Estaría el silencio de la prensa igualmente callada? Pues no, seguramente estaría la prensa deportiva echando sus máquinas humos negros. Pero como ha sido el Real Madrid con unas notas vagas y merodeando en el ridículo les ha bastado para quedar bien ante el público en general. Los españoles no nos merecemos lo que han hecho estos dos «señores» del balompié. La noticia de esta designación del Madrid con este seleccionador y ahora entrenador del Madrid le han hecho un flaco favor a España y a los españoles. Si levantara la cabeza don Santiago Bernabéu diría que el señorío de este Real Madrid lleva tiempo perdiéndose en las tinieblas de sus egos. Entre todas las crónicas, los comentarios en la televisión y en todo tipo de periodismo me quedo con la frase que dice José María García en Radio Marca: «Florentino y Lopetegui se permiten el lujo de traicionar a un país». Que yo digo España. JOSÉ MEDINA PEDREGOSA CÓRDOBA