Hallan el cadáver del hombre desparacido en agosto en Alcolea
▶ El cadáver apareció en un paraje próximo a la barriada periférica: La Campiñuela
El cadáver hallado en la mañana de ayer en el paraje «La Campiñuela» de Alcolea corresponde a Juan José Santos Moreno, el hombre de 76 años desaparecido el pasado 12 de agosto en la barriada cordobesa, según ha confirmado a ABC una de sus hijas que regresaba anoche a Córdoba desde Dublín tras enterarse del fatal desenlace.
Agentes de la Policía Nacional son los encargados de investigar el hallazgo de este cadáver en un paraje próximo al barrio periférico de Alcolea. La autoridad judicial ordenaba el levantamiento del cadáver y trasladaba el cuerpo hasta el Instituto de Medicina Legal para realizarle la autopsia confirmarían las causas de la muerte y pruebas de ADN para corroborar su identidad.
Hasta el lugar del hallazgo del cadáver, una zona conocida como «La Campiñuela» se trasladaron agentes de la Policía Judicial de la brigada de Homicidios de la Policía Nacional, así como especialistas de la Policía Científica.
Hay que recordar que la familia de Juan José Santos Moreno inició una intensa búsqueda tras la desaparición y realizó numerosas batidas por la zona donde desapareció este vecino con ayuda de voluntarios.
La última vez que fue visto Juan José Santos fue en la barriada El Sol el pasado 12 de agosto cuando salió a hacer senderismo. La Policía Nacional llegó a incorporar un helicóptero como complemento al operativo de búsqueda de este vecino de Alcolea. Desde entonces y hasta ayer mismo, se buscaba a este varón de 76 años que salió a andar por la zona de la barriada El Sol del municipio cordobés.
La Policía Judicial fue la encargada de investigar esta desaparición del hombre en coordinación con los bomberos y la Policía Autonómica, que rastreó con vehículos adecuados para la zona de campo y que es la encargada de vigilancia y control en esta zona abruptas. La familia apuntaba entonces que se trataba de un «caso urgente» dadas las condiciones climáticas (en plena ola de calor) y que el desaparecido sufría diabetes senil –con subidas y bajadas de azúcar– lo que pudo provocar que el hombre se desorientase. Descontenta con los medios policiales, la familia llegó a denunciar «que sentía impotencia por no tener medios suficientes para su búsqueda».