De la habitación al puesto de la cacería
Villanueva del Rey apuntala y afianza el boom del turismo cinegético con nuevas infraestructuras hoteleras
Hace una década era algo excepcional ver a pequeños grupos de visitantes extranjeros campar por la comarca del Valle del Guadiato prestos a participar en las numerosas monterías que se desarrollan a lo largo de la temporada en los prestigiosos cotos de esta zona norte de la provincia. Desde hace cinco años, el número ha ido en aumento y ahora es algo más que habitual. La Moheda, Dehesa del Manzano, La Mesa, La Jarilla o Las Erillas son manchas y fincas públicas y privadas que desde hace años copan los principales premios del país por la calidad de sus trofeos.
El turismo cinegético se ha consolidado de tal manera en municipios como Hornachuelos, Espiel o Villanueva del Rey que ha obligado a los ayuntamientos de la comarca, así como a los empresarios de la zona, a ponerse las pilas para atender a esta nueva realidad. Desde entonces, los cortijos abandonados han renacido convertidos en casas rurales y el número de hoteles se ha incrementado.
En Villanueva del Rey se ha apuntalado este importante nicho de empleo durante los meses de temporada con la reciente construcción del Hotel Rural
Las Monteras, un equipamiento del Ayuntamiento villanovense pero de gestión privada que se inauguró hace tres años y que tiene en el turismo cinegético el grueso de su ocupación entre los meses de octubre y marzo, que es cuando transcurre la temporada de caza mayor. Su director, Francisco Gutiérrez, señala que sus principales clientes en estas fechas son personas que comparten un nexo común: su afición
a la caza. Y hay otro elemento más, su procedencia de lugares más allá de los límites de la provincia y el territorio nacional. «Nuestros clientes extranjeros suelen venir de Portugal, Francia o Alemania, principalmente», señala. Llegan a través de touroperadores especializados. Igualmente de importantes son los viajeros nacionales, en su gran mayoría de Madrid, que pasan las horas previa a su participación en las monterías en las instalaciones de este hotel rural.
El perfil de los turistas cinegéticos no ha cambiado respecto a los de aquellos pioneros. Siguen siendo «de un nivel adquisitivo medio-alto», indica el director de Las Monteras. La única diferencia es que ahora, en lugar de tener que hacer noche en hoteles de Córdoba, tienen una amplia oferta en la comarca del Guadiato.
El alcalde de Villanueva del Rey, Pedro Barba, apunta que la caza como reclamo turístico «todavía se puede potenciar más». Señala que en los útimos años se ha incrementado sobre todo la llegada de turistas alemanes. El único inconveniente es la baja pernoctación, ya que suelen pasar sólo la noche antes de la cacería. No obstante, durante la temporada de caza las plazas hoteleras en el municipio se mantienen «con un nivel de ocupación del 70 al 80 por ciento todos los fines de semana, dependiendo de las monterías», indica Barba.
FORÁNEOS Los cazadores que pernoctan son en su mayoría alemanes, franceses y portugeses