Ambrosio exige recursos a Junta y Gobierno con 113 millones en caja
▶ Bellido le pide que «no frene» el «desarrollo de Córdoba» en lo que resta de mandato
La temperatura política en el Ayuntamiento de Córdoba cobra de nuevo fuerza tras las elecciones del pasado día 2. El anuncio este viernes por la alcaldesa, Isabel Ambrosio, de un plan de impulso para la ciudad escudándose en el «agravio» hacia la misma por otras administraciones y presentando proyectos antiguos como nuevos resortes para ese plan no ha tardado en suscitar las críticas hasta de sus socios de gobierno de Izquierda Unida, pero también del principal partido de la oposición, el PP.
Su portavoz municipal y candidato en los próximos comicios locales, José María Bellido, pidió ayer a Ambrosio que «no estorbe ni obstaculice el desarrollo de Córdoba en los meses que le quedan en la Alcaldía». En un comunicado, el concejal popular agregó que «si algo ha supuesto un freno para la ciudad, han sido los 40 años del PSOE en la Junta de Andalucía, de los que Ambrosio ha sido responsable como delegada del Gobierno desde 2008 a 2015».
Bellido sostuvo que «el cambio de gobierno supondrá un revulsivo a la ciudad, pues se pondrán en marcha los proyectos que el PSOE y Ambrosio, desde la Delegación del Gobierno, han negado a Córdoba». eEl líder popular incidió en el cambio de estrategia de la regidora a pocos meses de la cita con las urnas. «Sorprende el nerviosismo de la alcaldesa tras los resultados electorales del 2 de diciembre, la falta de calma que le ha llevado a presentar y hablar de proyectos para trata de ocultar el vacío absoluto de su mandato», comentó.
«Lealtad a la Junta»
Para los populares resulta más que probable que en los próximos meses, y de cuajar finalmente el acuerdo de gobierno con Ciudadanos y el apoyo de Vox, las administraciones locales gobernadas por los socialistas se conviertan en arietes de reclamación y exigencia contra la Junta. Es por ello por lo que Bellido le pidió ayer a Ambrosio «lealtad institucional y responsabilidad en el tiempo que le queda en la Alcaldía con el próximo gobierno de la Junta, que no se dedique a poner freno ni trabas a los proyectos que se impulsarán y que ellos dejaron aparcados».
La regidora exige ahora inversiones al Gobierno y la Junta en un momento en el que su tesorería municipal tiene 113 millones de euros sin ser utilizados, según el último control contable del Área de Hacienda (tres más que en octubre) y una larga lista de proyectos parados. Algunos ejemplos son el Centro de Convenciones, la Normal de Magisterio, el Polideportivo de la Juventud, losp lanes de obras en barrios el plan integral contra la pobreza en tres barrios; el Plan Turístico de Grandes Ciudades (Templo Romano, Regina,...) o la Escuela de Hostelería, entre otros...
Ambrosio fue diputada en el Parlamento andaluz entre 2004 y 2008 y, posteriormente, la máxima responsable del Gobierno andaluz en Córdoba hasta 2015, fecha en la que optó a la Alcaldía y que obtuvo por el acuerdo con IU y Ganemos. Ayer volvió a incidir en los mismos argumentos de su comparecencia del viernes con otra nota en la que denunció la «discriminación de Córdoba» y «exigirá actuaciones a los gobiernos central y autonómico para acabar con esta situación».
«Córdoba necesita más recursos para acabar con el desempleo y eso no se consigue solo con mocions en el Pleno del Ayuntamiento. La ciudad de Córdoba tiene que hacer oír su voz de una vez por todas», señaló. La regidora anunció que realizará una ronda con agentes sociales de la ciudad para trasladar esta idea y culpó a la gestión del PP en el Gobierno el «tener que haber dedicado este tiempo en el Ayuntamiento a reconstruirlo».