Josema Rescisión y final de una apuesta que salió mal
–Los diez peores meses de su vida. ¿En lo deportivo, personal, profesional?
–No he vivido en otro sitio lo que ha pasado en el Córdoba en este tiempo. Diría que ha sido una fase dura y desagradable. Y lo he pasado mal, como le ha sucedido a los trabajadores del club. Pero yo sé que Jesús León también lo ha pasado mal por no pagar. Tal vez, lo que menos se han dado cuenta de todo esto han sido los jugadores. Pero yo me he ido tocado del Córdoba y he aprendido mucho de esas familias que tan mal lo han pasado. Ahora lo que espero es que todo se solucione de cara al futuro, porque en el pasado vivimos y pasamos por un descenso encubierto desde el primer día. Porque sigo pensando que eso estaba así.
–¿Tan cerca del abismo estuvo el club?
–Las ventas de enero y lo grande que es el Córdoba ha evitado que nos convirtiéramos en un nuevo caso Reus.
–Ha visto el fútbol desde muchos prismas. ¿Tan distintos los jugadores de hoy a los de antes?
–Vamos a decir que su grado de compromiso es menor. Creo que están infectados por las redes sociales y eso no pasaba antes. Se mira menos al compañero y más al ombligo. Y no soy capaz de asimilarlo. De hecho, creo que hay jugadores que no han estado al nivel de lo que requiere un club como el Córdoba y eso es algo que me duele especialmente, porque es mi club.
–¿Cómo lo ve en el futuro?
–No tengo ni idea. Lo que sí puedo decir es que pensaba en un Córdoba con estructuras parecidas a las del Celta u Osasuna. Sé que haciendo las cosas bien habrá opciones de subir. Incluso, repito que este año pasado nos impidieron competir porque con el presupuesto que tenía poco se pudo hacer. LaLiga actuó así y nos castigó.
–Pero lo del límite tiene matices. El Huesca subió con un límite que no llegaba a los 4 millones.
–Creo que no era así, casi podía duplicar lo que tenía el Córdoba, ya que la El Córdoba CF anunció a través de un comunicado oficial un acuerdo con el defensa central Josema para rescindir el contrato que vinculaba a ambas partes hasta el 30 de junio de 2020. De esta forma, la entidad blanquiverde sigue con su particular «operación salida» de jugadores con contratos que se podrían denominar «altos» de cara al próximo ejercicio en Segunda B. Además, se da la circunstancia de que ese proceso se ha iniciado con los tres jugadores de la agencia de representación de Joaquín Vigueras, ya que los primeros fueron Carrillo y Jaime Romero. Josema llegó en verano de 2017 avalado por una gran temporada en el Murcia, donde actuó como cedido por parte del Almería. De hecho, el club hizo un desembolso de 250.000 euros. Sin embargo, el jugador no terminó de cuajar. En el pasado ejercicio, actuó en 12 partidos de Liga y uno de Copa del Rey. Comenzó con el Sochaux, de la Segunda de Francia, antes de regresar a España en diciembre. El Córdoba se planteó quedárselo, pero sus problemas con el límite salarial le obligaron a buscar acomodó en el Nástic, donde tampoco brilló. mayoría de contratos eran de Segunda División B.
–Antes de que lo olvide: ¿Dijo no a coger al equipo en el banquillo?
–No es algo que ahora tenga más importancia o no viene a cuento. Cuando llegué al club, dije al presidente que sólo sería director deportivo.
–¿Habrá tercera o cuarta vez?
–Ya una tercera lo veo complicado. El año pasado dejé a la gente de Indonesia colgada y no es mi estilo, pero iba al sitio que para mí es tan especial y que me ilusionaba. Ahora tengo una misión que cumplir y lo peor que llevo es que la familia está a mucha distancia.