Ha terminado»
seguimos alerta y preparados para las heladas», dijo el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, portavoz principal del Ejecutivo en esta crisis.
Se trata de un formato muy distinto al empleado en la primera ola de la pandemia, cuando ese rol lo asumió en primera el presidente del Gobierno. En estos momentos Pedro Sánchez mantiene un segundo plano, limitando su exposición a presidir las reuniones del Comité Estatal de Coordinación y Dirección del sistema estatal de Protección Civil.
Uno de los mensajes que el Ejecutivo quiso ayer explotar es el de pedir a la gente que no salga de casa si no es indispensable. «No hemos recuperado la normalidad», dijo Ábalos, que expresó que en lo que se refiere a la circulación las placas de hielo suponen «una gran amenaza» para la seguridad.
La ministra Robles desaconsejó «por completo» el uso del coche y en general a todos los ciudadanos que no salgan de casa «si no es indispensable». Se advierte ya de que los servicios de emergencias están viendo cómo se incrementan las urgencias traumatológicas derivadas de las caídas. Y en esta situación, y con la pandemia en fase creciente en su tercera ola, la atención hospitalaria se complica doblemente.
La intensa nevada registrada este fin de semana en el interior y sureste peninsular ha dejado numerosos pueblos aislados y sin suministro eléctrico. En Aragón permanecen incomunicados por la nieve y el hielo las localidades de Anadón, Maícas y Blesa, además de unos 40 pequeños núcleos aislados, entre masías y pequeñas pedanías. Es el caso de La Estrella, donde solo vive un matrimonio de octogenarios. La Estrella pertenece al término municipal de Mosqueruela, en la comarca de Gúdar-Javalambre. En gran parte de la provincia de Teruel, el temporal Filomena ha dejado paso a temperaturas mínimas que en algunos puntos llegan a bajar de -10 ºC. Ayer, por ejemplo, la localidad de Calamocha registró 13,5 grados bajo cero.
«El matrimonio de La Estrella se encuentra bien, están en contacto con un hijo y no les falta nada urgente, porque habían comprado medicamentos», explicaron a ABC fuentes de la Guardia Civil, que realiza un puntual seguimiento de los núcleos que han quedado aislados para activar de inmediato los dispositivos de ayuda cuando son necesarios. Junto al Maestrazgo, el Jiloca y Albarracín, son las zonas más azotadas por la nieve y la ola de frío en Aragón, en las que se concentran mayoritariamente los núcleos que permanecen aislados en la provincia de Teruel.
El paso del temporal Filomena también ha causado estragos en CastillaLa Mancha. Y no tan solo porque las carreteras siguen acumulando una gran capa de nieve y ahora de hielo, sino también porque muchos de ellos siguen sin luz y sin teléfono. Aunque en la gran mayoría se ha restablecido ya la electricidad, actualmente unos 2.000 abonados de Castilla-La Mancha continúan sin luz, según los datos del Servicio de Emergencias 112.
Por provincias, la más afectada es Toledo, con más de 1.000 de esos abonados. Uno de los casos más paradigmáticos es el del municipio toledano de Villamuelas, donde llevan sin luz ni teléfono desde el viernes por la noche. Así se lo explicó ayer a ABC Nelson
Más de 40 núcleos de población se encuentran aislados en la comunidad de Aragón