«Los hospitales en Londres están desbordados, mucho más que en España»
▶ Una enfermera onubense relata el caos en el país origen de la nueva cepa del Covid
A su regreso a Londres, tras pasar las vacaciones de Navidad en Huelva, Isabel Arrabal ha encontrado una ciudad confinada y «fuera de control» por el coronavirus, tras la detección de la nueva cepa británica. Lo ha sabido de boca de las autoridades en televisiones y radios desde su encierro obligado, una cuarentena de diez días que está guardando desde su llegada de España, antes de poder incorporarse al trabajo.
Arrabal, enfermera onubense con 20 años de experiencia en la sanidad inglesa, trabaja en uno de los centros de referencia de la capital, el
Saint Thomas Hospital
–en la orilla contraria del Támesis en la que se ubica el Parlamento–, donde ayuda a traer bebés al mundo tras formarse como matrona en el University College London Hospital.
«La situación es mucho peor que en España, se les ha desbordado y los hospitales están saturados, bajo presión». Mientras habla con ABC, Arrabal lee las últimas cifras oficiales, 529 muertes en el Reino Unido en las últimas 24 horas. «Es alarmante, desorbitado. Según anuncian –dice– aquí estamos en el peor punto de la pandemia».
Los aumentos de contagios se hacen notar en los hospitales, no sólo por los ingresos por Covid sino –afirmapor los de pacientes, intervenciones aplazadas y tratamientos que no se pueden llevar a cabo.
El repunte de casos llega justo tras la salida del Reino Unido de la Unión Europa y la marcha de personal sanitario a raíz del Brexit es para tener en cuenta. «Mucha gente se ha vuelto a sus países de origen y se nota. Muchas compañeras, las más jóvenes que han estado llegando a Inglaterra en los últimos 3 o 4 años, la mayoría de ellas se ha ido», asegura la onubense, que ha optado por permanecer de momento en suelo británico –tiene la ciudadanía desde 2008–.
El Servicio de Maternidad en el que trabaja en Londres no es ajeno a la pandemia. «Tenemos bastantes pacientes infectadas con el virus y existe el miedo de que los bebés puedan contraer la enfermedad. A las mujeres hay que darles mucha información que no les llega», elementos que se suman –agrega- a la falta de contacto con familiares y amigos. «Los nacimientos son un momento de felicidad y las madres no tienen el apoyo familiar, ni la presencia del padre en un momento tan crucial».
Las limitaciones impuestas por la crisis sanitarias se traducen en «tensión y desanimo» en las pacientes, que se traslada al ambiente –dice– mientras el personal «intentamos ayudarlas y hacerle el ingreso lo más llevadero posible».
A Isabel le tocará vacunarse en cuanto vuelva al trabajo, como ya han hecho parte de sus compañeras del área de Maternidad. En el Saint Thomas están ofreciendo la vacuna de Oxford que caba de aprobar Reino Unido, en su centro de salud la de Pfizer, que se está administrando actualmente en Andalucía. Le quedan solo unos días para decidirse.
Isabel Arrabal en el Hospital Saint Thomas de Londres
Tras volver de sus vacaciones en Huelva sigue aislada antes de reincorporarse al hospital
Ella no se volverá, pero conoce a muchas compañeras españolas que han dejado su trabajo
Tras la expansión de la pandemia, la enfermera de Huelva confirma que las autoridades sanitarias del país «han desplegado una campaña de vacunación asombrosa, están desbordados vacunando a todo el mundo», aunque se están encontrando con falta de personal por las bajas y los contagios
en todos los centros sanitarios.
«El virus nos ha cambiado todo, es estresante y se soporta mucha carga de trabajo, con las bajas como añadido, pero la gente sigue, y nos damos apoyo las unas a las otras, he tenido mucha suerte de haber elegido trabajar en este hospital maravilloso».