Piden 5 años más de cárcel para Hasel por los disturbios de 2018
Desórdenes públicos, daños y lesiones, atentado contra la autoridad... El ya de por sí complejo horizonte judicial de Pablo Hasel podría enredarse aún más después de que la Fiscalía haya pedido otros cinco años de cárcel para el rapero ilerdense. En esta ocasión, el Ministerio Público acusa a Hasel, encarcelado desde hace dos semanas para cumplir una pena de nueve meses de cárcel por enaltecimiento del terrorismo, de ser uno de los cabecillas del intento de asalto a la Subdelegación del Gobierno de Lérida en marzo de 2018 tras la detención de Carles Puigdemont en Alemania.
«Hoy los Mossos han detenido a tres compañeros y nos han citado para declarar a unos cuantos más por protestar frente a la Subdelegación del Gobierno ante los encarcelamientos de independentistas. Esto será un no parar mientras no conquistemos una república popular», escribió Hasel en su cuenta de Twitter poco después de aquella ‘protesta’ en la que cuatro agentes de los Mossos d’Esquadra resultaron heridos y se registraron numerosos desperfectos.
Ahora, y según avanzó ayer ‘El Mundo’, la Fiscalía señala a Hasel como uno de los responsables del intento de asalto al edificio gubernamental y pide para él cinco años y tres meses más de cárcel acusado de de desórdenes públicos, atentado a la autoridad y lesiones y daños. Además, la acusación reclama también 7.000 euros de indemnización para pagar los daños y otros 4.000 para los policías autonómicos que resultaron heridos. Junto a Hasel, la Fiscalía acusa a otras diez personas como instigadoras de los altercados. «Previo acuerdo con otras personas no identificadas, [los acusados] empujaron a las líneas policiales hacia el edificio, gritando e incitando al resto de los 3.000 manifestantes que al menos allí se encontraban a hacerlo», describe la acusación en un escrito que detalla también cómo «todos los acusados, con evidente intención de alterar la paz pública, acorralaron a los agentes por medio de patadas y empujones que propinaban ayudándose del anonimato».
PABLO HASEL