Luz verde a la primera cuenta general de la etapa de Moreno
La Cámara de Cuentas de Andalucía ha vuelto a la ‘nueva normalidad’ tras la toma de posesión de la nueva presidenta, Carmen Núñez. Sustituye al consejero del PSOE Antonio López, quien se resignó a dejar el cargo tras recibir dos informes jurídicos que avalaban que su mandato estaba agotado. El pleno del órgano fiscalizador aprobó ayer por unanimidad el informe definitivo de la cuenta general de la Junta de Andalucía relativo al ejercicio de 2019, el primero de la era del presidente Juanma Moreno. Los consejeros del PP, PSOE —incluido el presidente saliente, que continúa como consejero raso—, Ciudadanos y Adelante Andalucía votaron a favor de la aprobación del informe.
Al cierre de 2019, el primer ejercicio liquidado del Ejecutivo regional del PP y Ciudadanos, la Cámara de Cuentas constata en su auditoría la mejora de los principales agujeros que lastraban las cuentas de la Junta de Andalucía: los pagos realizados o libramientos sin justificación y la deuda no contabilizada, lo que popularmente se conoce como facturas pendientes de pago guardadas en los cajones.
Entre 2018 y 2019 la Junta de Andalucía ha rebajado en 292 millones de euros el importe acumulado de los pagos que han sobrepasado el plazo legal para que los beneficiarios acrediten su correcta utilización de los fondos públicos.