El noble arte de marear la perdiz
Anda la ministra de Justicia reuniéndose con portavoces parlamentarios con el fin de aparentar lo mucho que trabaja el Gobierno para desbloquear la renovación del CGPJ, que como todo lo que viene de nalgas para Moncloa ‘es culpa del PP’, naturalmente. El noble arte de marear la perdiz debiera quedar reservado para asuntos menores. Mientras no se arranque Sánchez a despolitizar la composición del Consejo, estos juegos malabares del presunto ‘diálogo’ son una manera de entretener el tiempo y de fingir.