ABC (Córdoba)

Cháchara y chachachá

En la algarabía de opinión de la tele ya casi no cabe un periodista

- BALA PERDIDA ÁNGEL ANTONIO HERRERA

Los políticos cesantes, o cesados, van pillando empleo en los platós de la tele de nueva temporada, con lo que ya vemos que para tertuliano puede servir cualquiera. Esto es casi decir que para político también vale cualquiera, aunque eso lo sabíamos antes de que hayan vuelto al tajo las reinas de la mañana. Ya hemos sobrepasad­o la sospecha de que la vocación de servicio social puede rematarse aliñando lentejas ante la afición de ‘prime time’. Es desconcert­ante opción de futuro, pero opción que ahí está, prorrogand­o unas biografías que abarcan el Congreso de los Diputados y la sala de maquillaje de Jorge Javier. Igual de pronto te echan del partido, o de un ministerio, pero te fichan de Telecinco, que tampoco es mala puerta giratoria. No sé qué remota lujuria mueve a políticos de alta titulación para emplearse en los platós de alegría, donde importa la cháchara, pero más el chachachá. Hacen bien las teles, o las radios, incluso, en pescar a vedetes de la política, para animar el sarao, porque a menudo ya no basta un cambio de sastrería de las presentado­ras para solventar la competició­n del ‘share’. Pero me inquieta y me desanima y hasta me jode que los que ayer tuvieron gobierno ahora se coloquen en silla de enterados a explicarno­s el mundo que no arreglaron, o bien a cocinar una lubina de concurso, ante el asombrado graderío televident­e. Casi me parece mucho peor lo primero. En la algarabía de opinión de la tele ya casi no cabe un periodista, o un escritor, porque se está poniendo todo perdido de políticos que ya no lo son. Van colonizand­o el medio, igual que colonizan la Feria del Libro los cocineros. Nos dio como un poco de susto un día Pedro Sánchez al adornar de ministro a Màxim Huerta, avalando que una llamada de móvil resuelve la distancia desde un plató a un ministerio. Ocurre ahora lo mismo, sólo que al revés. Quienes tuvieron batuta de jerarquía, en la política, van y se ocupan de animadores en la verbena de alrededor de los telediario­s, donde ayer fueron alguien. Algo.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain