El PSOE discrimina y pide bajar las ratios solo para algunos centros
▶ Propone reducir la cantidad de alumnos por profesor en los colegios «de mayor complejidad»
El PSOE ha propuesto una PNL (proposición no de ley) en la que propone reducir las ratios, es decir, el número de alumnos por aula, solo en las escuelas «de mayor complejidad, vulnerabilidad y estado de necesidad». El objetivo, según el documento publicado en el Boletín Oficial de las Cortes Generales es «garantizar unos criterios de justicia y equidad comunes en todas las autonomías para reforzar la cohesión social y educativa». El Gobierno socialista, aseguran, «está comprometido» con la calidad de la mano de la equidad y la inversión y por eso quieren centrarse en «los centros sostenidos con fondos públicos que acumulan una mayor complejidad y vulnerabilidad social» es decir, los que ellos también llaman, ‘colegios gueto’.
El texto señala en su exposición de motivos que la bajada de ratios en pandemia (junto a otros elementos como las inversiones o el esfuerzo de alumnos, familias y docentes) ha ayudado a mejorar «los índices de graduación en ESO y Bachillerato durante el pasado curso 2020-21». Sin embargo, tal como informó ABC, ya en el primer ‘curso pandémico’ 2019-2020 un estudio de la OCDE mostraba el alto índice de graduados en Bachillerato respecto al curso anterior, algo que no fue bien visto por el ‘padre’ del famoso estudio PISA, Andreas Schleicher y autor del estudio. «El hecho de que las tasas de titulación aumentaran en España no es una buena señal. No indica que haya jóvenes más cualificados sino que se rebajaron los criterios de éxito», dijo cuando ABC informó de que 30.531 alumnos más fueron aprobados en el primer ‘curso pandémico’. En el curso 2019-2020 aprobaron el 92,2% de los alumnos, 8,6 puntos porcentuales más que el anterior.
Sin aval internacional
El texto del PSOE, en cualquier caso, siguiendo con su idea de bajar las ratios, plasma que esos datos de graduación no hacen posible «defender» que el descenso en el número de alumnos sea el factor determinante en la mejora de resultados «en un contexto tan atípico y de emergencia como el que ha vivido la educación española». También citan otros estudios de la OCDE que sostienen que los resultados no están tan relacionados con el tamaño de las clases, «como con la inversión en
Una profesora acompaña a alumnos de Primaria
la calidad docente y cómo se organice la carga docente en el centro y la carga lectiva en el aula». Añaden que «no hay evidencia internacional que respalde los beneficios de la bajada de ratios». Todo para concluir que donde sí hay evidencia de mejora es en las escuelas de alta complejidad y vulnerabilidad social, «junto a cambios metodológicos y didácticos que posibilitan la atención a la diversidad, el trabajo en equipo y un aprendizaje más profundo y menos encorsetado. Con esta combinación, se reducen los problemas disciplinarios y se mejora la convivencia, el alumnado se compromete más con el aprendizaje y logra mejores resultados, multiplica sus oportunidades de graduarse en la educación posobligatoria y el profesorado mejora sus condiciones de trabajo y su compromiso con el proyecto de centro».
Para los sindicatos la medida es buena pero «insuficiente». Paco García, secretario general de Enseñanza de CC.OO. asegura que la PNL no le parece «mal» pero que representa solo un «avance puntual» y que no deja de estar cargada de «ironía». ¿Por qué? «Habla de reducción de ratios cuando van a subirlas este curso respecto al pasado. Además, lo han hecho en contra de la comunidad educativa y la opinión de expertos que defienden que lo prudente sería evaluar la vuelta a las aulas y decidir en función de las circunstancias». Para García, «hay que abrir un debate de fondo sobre las ratios en general, no solo en los centros de difícil desempeño».
Para Mario Gutiérrez, del sindicato CSIF, la propuesta «busca de nuevo que el ministerio haga recomendaciones a las comunidades obviando la responsabilidad que tiene Educación para velar por la igualdad de oportunidades en el acceso al derecho de la educación. La Lomloe (o ‘ley Celaá’) ha perdido la oportunidad de reducir una ratio máxima establecida ya hace 40 años en la Logse de 1990 y que es una medida exigida por todos los profesionales a la educación». El texto del PSOE también aprovecha para hacer críticas a las comunidades del PP. Así, señala que hay «una enorme disparidad entre comunidades por la desigual importancia, prioridad e inversión concedida a la escuela pública. Mientras las ratios de la red pública de Aragón son 15,3 (Primaria) y 15,6 (ESO) en la red privada de la Región de Murcia son de 24,2 y 25,9, respectivamente». Concluyen, así, que «las comunidades con gobiernos socialistas no pueden compararse con las gobernadas por el PP». Sandra Moneo, responsable de Educación del PP dice que «crear grupos que no fundamenten su trabajo en evidencias empíricas sirve de poco. El PP ha defendido siempre medidas específicas en centros de actuación preferente y ha encontrado siempre la oposición del PSOE».
«Hablan de reducción de ratios cuando van a subirlas este curso respecto al pasado en contra de la comunidad educativa»