Black Friday 2022: menos ofertas y contrataciones y un consumo incierto
La pérdida de poder adquisitivo y la poca capacidad del comercio para fijar descuentos dejarán sabor agridulce
El Black Friday, que comienza el próximo viernes, se ha convertido en los últimos años en una de las grandes citas para el comercio, que ha señalado esta fecha como el pistoletazo de salida para la campaña de Navidad. Su peso en las cuentas de la empresas es ya sustancial, pues se calcula que un tercio de las ventas de este periodo, el de mayor facturación del año para la distribución, se realiza en este día y el sucesivo fin de semana, además de en el Cyber Monday.
Pero este año podría ser distinto. La escalada inflacionista y el rejonazo que ha metido al poder adquisitivo de los españoles amenaza con menguar las ventas durante esta época. No son pocos quienes avisan de ello. Por parte del consumidor se espera que el bolsillo esté más apretado, pero también habrá menos voluntad del lado de las empresas, que ofrecerán menos ofertas y a precios por encima de otras temporadas.
El informe Black Friday & Cyber Monday en España elaborado por Google para Rocket Digital y Shopify pone de relieve algunos de estos factores. Revela que cada consumidor gastará 200 euros durante esta jornada, algo menos que el año pasado cuando cada español desembolsó 210 euros de media.
Un escenario que se viene propiciado, además de por el aumento de los costes energéticos, por el alza de los tipos de interés, que ha disparado las mensualidades hipotecarias. De hecho, el 71% de los encuestados por Google señala su preocupación por el incremento de los costes de vida respecto a su capacidad de gasto.
Según el estudio de Google para Rocket Digital, los españoles mirarán el precio durante el Black Friday pero dependiendo de la categoría de productos. En el caso del deporte y de la alimentación, los consumidores están dispuestos a pagar más, pero en cambio ahorrarán en productos de tecnología y en ropa, este último uno de los grandes reclamos de la fecha. Así, un 42% de los encuestados asegura que, en caso de reducir el presupuesto, recortará el gasto para esta partida.
La encuesta también muestra un incierto comportamiento por parte de los negocios. «Estamos viendo una menor capilaridad de descuentos en la mayoría de las tiendas, pero con fuertes ofertas en alguna categoría o marca específica que ayudan a generar un gancho para luego intentar aumentar el número de productos de cada compra», explica la directora de medios de Rocket Digital, Marta Sánchez. Y añade que en algunos productos «no será posible aplicar una bajada de precio, aunque las marcas propias o los artículos locales tienen más posibilidad de ser rebajados que otros productos que dependen de la producción en China o cuentan con elevados costes de transporte».
Con todo, desde Rocket Digital señalan que los porcentajes de los descuentos y ofertas del Black Friday 2022 dependerán de cada negocio, del ‘stock’ acumulado por cada firma comercial y de los costes variables que soporte cada empresa. Pues dependerá del tamaño de la compañía y las posibilidades que les otorgue su capacidad.
Tampoco percibe que vaya a haber una gran oleada de descuentos la responsable de la industria de retail de Oliver Wyman en España, Beatriz Fernández.
La experta señala el dilema que tendrán las empresas pues dado que en plena desaceleración del consumo «la única forma de incentivar las ventas parece ser a través de descuentos», el margen que normalmente tenían para ejecutar las ofertas «se ha reducido notablemente y, a pesar de que otros eventos en el año han experimentado altos descuentos, todo parece indicar que no se repetirán durante estas fechas».
Algo que ya corroboró a este periódico el presidente de Acotex, Eduardo Zamácola. El líder de los empresarios del textil ya preveía en octubre un ‘viernes negro’ flojo por la escasa capacidad de los comercios de ropa para ofrecer descuentos, después de meses donde se ha vendido poco y no han podido dar salida a la colección de invierno por la caída del consumo y las altas temperaturas que han empezado a menguar muy recientemente.
Los buenos vaticinios tampoco llegan del lado de las cifras de empleo. La empresa de empleo temporal, Randstad, estima que la contratación de personal para la campaña de Navidad caerá un 17,3% este año. Se firmarán 402.040 contratos por los 485.942 que se sellaron durante el mismo periodo de 2021.
Compras pendientes
Las grandes distribuidoras, sin embargo, apuntan a que la edición 2022 del Black Friday se saldará con los mismos o mejores resultados que en años anteriores. Así lo señalan las empresas pertenecientes a la patronal Anged, entre las que se encuentran El Corte Inglés, Ikea y las marcas de ropa de Tendam (Cortefiel, Pedro del Hierro, Springfield, etc.).
En concreto, la asociación indica que los descuentos previstos para el ‘viernes negro’ son una buena oportunidad para estimular muchas compras que los consumidores han retrasado a la espera de mejores ofertas. Sobre todo, en las categorías de electrónica, electrodomésticos, mueble y hogar, además de la moda.
Sobre estos últimos artículos, estiman que la llegada del frío y la combinación de los descuentos puede ayudar a recuperar las ventas de ropa de temporada que las altas temperaturas del otoño han retrasado. «También es previsible que muchas familias adelanten las compras de juguetes y regalos con el Black Friday, como demuestra la tendencia de los últimos años».