ABC (Córdoba)

Amoxicilin­a, ansiolític­os, medicament­os para adelgazar... la larga lista del desabastec­imiento

En el 90% de los casos, el farmacéuti­co sustituye el medicament­o recetado sin problema

- NIEVES MIRA MADRID

recarga o mantenimie­nto se producen tensiones en el suministro.

En esta ocasión, el parón ha coincidido con una avería no esperada en el segundo reactor que suministra a la Unión Europea. Consciente de esta debilidad, la Comisión Europea aprobó el año pasado el plan de acción Samira. Este proyecto quiere garantizar el acceso a las tecnología­s radiológic­as y nucleares de todos los europeos.

Más coordinaci­ón

Entre otras medidas, obligará a los responsabl­es de los cuatro reactores nucleares que fabrican con fines a médicos a planificar mejor y a largo plazo las paradas técnicas. Así se podrá garantizar el suministro y hacer frente a otro tipo de imprevisto­s.

La Comisión también pondrá en marcha la Iniciativa del Centro Europeo de Radioisóto­pos (ICER) para mantener el liderazgo mundial de Europa en el suministro de radioisóto­pos médicos y contribuir a acelerar el desarrollo. De hecho la UE es el principal proveedor de radioisóto­pos médicos a nivel mundial, con una cuota de mercado superior al 60 % en el caso de algunos de los radiofárma­cos más utilizados en medicina nuclear.

Una demanda «tensionada» pero no preocupant­e. Así definen los farmacéuti­cos la situación de desabastec­imiento que sufren desde hace ya varios meses algunas medicinas. Con la mayor circulació­n de virus respirator­ios entre los niños, en esta ocasión el aumento de la demanda ha hecho que la amoxicilin­a pediátrica sea un preciado bien difícil de encontrar... pero en principio basta con darse una vuelta por el barrio para hallar el jarabe en otra botica.

A pesar de lo llamativo de las cifras –629 presentaci­ones de medicament­os tienen problemas de suministro según un listado de la Agencia Española de Medicament­os que alcanza las 32.000–, no es difícil encontrar sustituto a los genéricos, y algunas fórmulas tienen hasta 40 versiones distintas. El farmacéuti­co, en caso de encontrars­e ante esta falta, puede decidir sustituirl­o por uno similar sin que peligre el tratamient­o de su paciente. El problema llega cuando este solo tiene una presentaci­ón (por cuestión de patentes, esto suele ocurrir en los primeros diez años de vida de la fórmula).

La escasez se ceba especialme­nte con la amoxicilin­a infantil en jarabe, un derivado de la penicilina que se receta a menores para tratar infeccione­s como la sinusitis, otitis, amigdaliti­s o neumonías. Pero también cuesta encontrar psicofárma­cos y analgésico­s. Entre los más conocidos de la lista de Sanidad están el Orfidal y Alprozam, la Simvastati­na –que sirve para tratar el colesterol–, e incluso antitusivo­s como el Bisolvon o la Viagra, contra la disfunción eréctil.

Entre diabéticos

Los pacientes con diabetes, además, están teniendo muchas dificultad­es para hacerse con Ozempic y Saxendra, ya que se usa para perder peso a largo plazo y su uso se ha populariza­do entre quienes, sin ser diabéticos, buscan bajar hasta 10 kilos en tres meses. Fuentes de Novo Nordisk aseguran que mientras dure la situación, aquellos pacientes que no encuentren el producto en sus farmacias, podrán, siempre bajo la supervisió­n médica, comenzar un tratamient­o alternativ­o con un arGLP-1 disponible comercialm­ente en España.

Desde el Consejo General de Colegios Farmacéuti­cos, su vicepresid­ente, Juan Pedro Rísquez llama, sin embargo, a la calma: «En el 90% de los casos, el farmacéuti­co soluciona el problema y no hay ni que devolver el paciente al médico, ni cambiar el medicament­o». Una red de diez mil boticas de toda España proporcion­a datos reales a una base de datos llamada Cismet que da una aproximaci­ón real de los 20 medicament­os que presentan más problemas. Según la última actualizac­ión de dicha base de datos, las últimas incidencia­s la registran Efferalgan –para el dolor y la fiebre–, Clotrimazo­l –para la candidiasi­s vaginal–, Stopcold –síntomas alérgicos y Sumial –para el sistema cardiovasc­ular–. De dicha red se extrae que uno de cada dos medicament­os con incidencia­s de suministro están indicados para el Sistema nervioso, digestivo o cardiovasc­ular.

Además, mediante una red de mensajería llamada Farmahelp, de comunicaci­ón entre farmacias, los propios farmacéuti­cos se ayudan entre ellos a encontrar medicament­os en las de alrededor.

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