Contra la violencia machista al grito de «nosotras no matamos»
Unas 3.000 personas se manifiestan con motivo del 25-N en la capital cordobesa
Varios miles de personas, la mayoría mujeres pero también bastantes hombres, se manifestaron en la tarde de ayer viernes en Córdoba con motivo de la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra cada 25 de noviembre. Por primera vez desde 2019, antes de la pandemia, la concentración se ha podido celebrar sin restricciones de ningún tipo, y eso permitió una asistencia masiva.
La manifestación, organizada por la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a las Mujeres, arrancó pasadas las 18.30 horas parar recorrer la avenida de la Victoria hasta llegar a los jardines del Plan Renfe, donde se leyó un manifiesto condenando la violencia machista.
De 20 en fondo, y con varias docenas de filas al comienzo de la protesta, se concentraron en la Glorieta de la Cruz Roja varios cientos de personas (según las estimaciones realizadas por la Policía Local al término de la protesta, sobre las 20.30 horas, fueron 3.000), que fueron aumentando conforme la marcha realizaba su recorrido, coreando consignas contra la violencia machista continuamente y sin dejar de animar.
En la cabecera, sin presencia de autoridades políticas —al menos de forma visible—, abundaban los carteles de protesta y antorchas. La mayoría de las asistentes iban vestidas con petos de color rojo con motivo del 25-N y al llegar al cruce de la avenida de la Victoria con la calle Concepción, las manifestantes protagonizaron una sentada.
El ambiente de la protesta fue festivo y reivindicativo a lo largo de todo el trayecto. Durante todo el recorrido no pararon de cantar consignas como «ni una más, ni una menos», «en la calle y en la casa se respetan nuestras vidas», «quien ama, no mata ni maltrata», «aquí estamos, nosotras no matamos» (con distintas variaciones), «si tocan a una nos tocan a todas», o «y luego diréis que somos cinco o seis».
Este año, las manifestaciones del 25-N, que se celebraron en la tarde de ayer por toda España con una asistencia también masiva, han estado marcadas por la polémica reforma de la ley del ‘sólo sí es sí’ del Gobierno de Pedro Sánchez, cuya interpretación en el ámbito jurídico ha supuesto acortar las penas en determinados casos de condenas firmas por violencia machista.
‘Sólo sí es sí’
El asunto no estaba en la agenda de la reivindicación del 25-N en Córdoba, pero fueron inevitables las referencias. La portavoz de la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a las Mujeres, María Gómez, aseguró al comienzo de la protesta que el colectivo feminista aún no ha entrado a valorar el fondo del nuevo texto legal. Aun así, «creemos que es una ley que es buena, pero ha habido una cosa que ha perjudicado en cierta manera», refiriéndose a la posibilidad de que algunos jueces interpreten la norma a favor de los condenados y se puedan así reducir las penas de prisión, un efecto no deseado del texto.
Gómez reparte las culpas del fiasco legal de la normal del ‘Sólo sí es sí’. Según sus propias palabras, «parece ser que ha pasado por todas las manos de los partidos, el Parlamento, instituciones, jueces... ¿y cómo es que hasta ahora no nos hemos dado cuenta de eso? ¿No hay gente más especializada para decir que podía pasar esto? ¿Por qué han callado todos?»
Entre las consignas se pudieron escuchar, «ni una más, ni una menos» o «en la calle y en la casa se respetan nuestras vidas»
La Plataforma considera que la ley del ‘sólo sí es sí’ es «buena, pero ha habido una cosa que ha perdjudicado»