Los obispos creen que «choca» con el derecho de los padres a la educación de sus hijos
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal, César García Magán, ha valorado el proyecto de ley que el próximo martes presentará Ione Belarra en el consejo de ministros y ha explicado que frente a los «tipos de familia» que propone la norma, la Iglesia presenta «el modelo de familia que está en el Evangelio». En la rueda de prensa posterior a la Asamblea Plenaria de los obispos, García Magán también alertó de que esta norma puede vulnerar el derecho constitucional de los padres a elegir la educación para sus hijos. En concreto hizo referencia a la prohibición expresa que establece la ley de que los padres puedan impedir que sus hijos participen en actividades escolares que difundan la «diversidad familiar» propuesta por el Gobierno .
Ante esto, García Magán explicó que el hecho de que la Iglesia presente su modelo de familia, «no implica condenar a nadie, sino respetar a todas las personas». «En el contexto de una sociedad democrática y plural –añadió– tenemos el derecho no solo de vivir según nuestro modelo, sino de proponerlo al resto de la sociedad, y eso no supone ninguna condena ni exclusión de nadie». «Los obispos presentamos nuestra posición, respetando las demás y pidiendo que la nuestra también sea respetada», concluyó.
También explicó «la derivación que tiene para los colegios» esta nueva norma, que dedica un artículo a «la diversidad familiar como principio del sistema educativo». En él, obliga a las administraciones públicas a incluir en los libros de texto el catálogo de familias que presenta la ley, a la par que señala que los padres de estos niños no podrán negarse a que sus hijos reciban esa formación. García Magán ha explicado que este planteamiento «choca con el derecho fundamental, recogido en la Constitución, de que los padres puedan optar por un modelo [educativo] para sus hijos». Preguntado por ABC, García Magán lamentó que en una «sociedad democrática, las leyes que afectan a aspectos fundamentales del bien común, y no solo en este tema de familia, no tengan un cierto consenso a la hora de legislar». El portavoz confirmó que la Conferencia Episcopal no fue consultada por el ministerio sobre el contenido de la ley. «Las normas que vamos a tener para nuestra convivencia en libertad, paz y armonía», añadió.