Doce campanazos del corazón
Ha sido un año intenso marcado por la coronación de Carlos III, escándalos reales, rupturas sospechosas, polémicas paternidades y truculentos descuartizamientos. Repasamos los bombazos de la crónica social
Parecía que ese día no iba a llegar nunca. Ocho meses después de la muerte de Isabel II, Carlos III fue al fin coronado en la abadía de Westminster. En la ceremonia, fiel a la tradición, Camila fue también coronada Reina consorte. El 6 de mayo comenzó una nueva era en Buckingham Palace, con relevante papel de los Príncipes de Gales y los Duques de Sussex empeñados en dar problemas con los Windsor y con la prensa. Son lo más parecido a la oveja negra de la familia, papel que aquí ocupa, por otras razones, Froilán de Marichalar. El hijo de Doña Elena fue pillado ‘in fraganti’ en Madrid antes de regresar a Abu Dabi paseando por todos los ‘after’ de la capital: ‘Froilán de todos los Antros’, llegaron a bautizarle en las redes sociales tras ser desalojado del Clandestino, un local ilegal en el que la Policía intervino distintas sustancias estupefacientes, como cocaína rosa. Las noches le confunden.
Ha sido el año de Bárbara Rey. La vedete aclaró por fin algunos capítulos de su polémico y mediático pasado. Las declaraciones de Ángel Cristo Jr. sobre su madre y el supuesto maltrato psicológico sufrido en su infancia han roto todos los puentes entre madre e hijo. Bárbara se refugia en su gran aliada, su hija Sofía.
Si la Casa Real española ya no tiembla con las confesiones de Bárbara Rey, la danesa sufre con el descubrimiento de la relación entre Genoveva Casanova y el heredero al Trono, el Príncipe Federico. Ambos fueron pillados en una escapada madrileña que vino a confirmar una relación más que amistosa.
Sueño cumplido
Obregón ha sido madre de su nieta y Bertín también aumenta la prole. La veteranía es un grado
A sus 68, Ana Obregón se convirtió en madre de su propio nieto, cumpliendo el sueño de su hijo, Aless Lecquio, y provocando todo un terremoto político a propósito del tema de la gestación subrogada. A sus 69, Bertín Osborne también aumenta la prole, pero la madre, Gabriela Guillén, no quiere saber nada de él mientras salen a la luz toda una ristra de supuestas infidelidades durante estos últimos años. En ambos casos, la veteranía es un grado. La crónica negra
tiene un gran protagonista:
Daniel Sancho, hijo del actor
Rodolfo Sancho, autor confeso de un descuartizamiento en Tailandia que sigue acaparando titulares dada su relación con la víctima, Edwin Arrieta. En enero fue detenido Dani Alves por una supuesta agresión sexual. Lleva en prisión desde entonces, a la espera de juicio, una situación que ha provocado su separación. Su mujer, Joana Sanz, que inicialmente le apoyó, está dolida porque el futbolista niega el delito, pero no la infidelidad. La venganza de
Shakira ha seguido este año su curso
musical. Cada canción ha sido una puñalada para Piqué, como hemos visto y escuchado en ‘Session 53’ con Bizarrap. La de Barranquilla, a la que han dedicado una estatua de seis metros en su ciudad natal, también ha llegado a un acuerdo con Hacienda y se ha instalado definitivamente con sus hijos en Miami, donde espera con paciencia que su suegro pise sepultura. Mientras, la pareja del año, Rosalía y Rauw Alejandro, rompió para desgracia de sus seguidores. Pero fue un caso extraño, porque nada cuadraba en esta historia de desamor: ambos acudieron como pareja a un programa de televisión cuando, en realidad, ya no lo eran.
¿Por qué siguieron fingiendo? Se desmintió que hubiera terceras personas. Por si fuera poco, se mandaron ‘puñaladas traperas’ en los Grammy Latinos: ella le dedicó ‘Se nos rompió el amor’ mientras él le tenía reservada una versión de ‘Se fue’.
Triunfó el amor
Pero el amor también ha triunfado este año: que se lo digan a Tamara Falcó, que tras la infidelidad y el perdón le dio el ‘sí, quiero’ a Íñigo Onieva antes de embarcarse en una eterna luna de miel que la que parecen no regresar nunca. Eternamente de vacaciones, quién pudiera.
Con el final del programa ‘Sálvame’ se cerró una etapa del corazón en televisión. Adiós a los chumineros, al pulpillo, a las bombas, al agua con misterio y a todo un universo de colaboradores entregados a un contenido que mezclaba salseo con humor, higadillos con un poco de petardeo.