Una década para recuperar otra gran historia de Córdoba
La del Palacio Episcopal no es una historia cualquiera. Aunque en su planta actual empieza a configurarse en el siglo XV gracias al obispo Sancho de Rojas, se erigió sobre el Alcázar califal, cuya superficie llegaba hasta lo que hoy son los baños visitables en los Santos Mártires. El permiso de la Gerencia de Urbanismo para iniciar la reforma del inmueble sede del Obispado supone dar carpetazo a una década de espera para poner en valor este edificio. Un proyecto que lanzó el anterior prelado (hoy arzobispo de Sevilla) monseñor Asenjo y que ha culminado Demetrio Fernández sorteando todos los obstáculos que ha puesto el cogobierno de PSOE e IU. El proyecto de Vázquez Teja despliega en la planta alta de las crujías de Torrijos y Amador de los Ríos toda la capacidad de arte sacro del Museo Diocesano. Edificios concebidos en su día como biblioteca e incluso caballerizas. La parte baja de esa «L» se destinará al recibo de los visitantes por la puerta del obispo Mardones y estancias de atención a los visitantes de la Mezquita-Catedral, que podrán disfrutar de los restos arqueológicos califales cubiertos y presevardos por un cubo acristalado. La inversión de este centro es de 4 millones de euros.