El acceso al crédito vuelve a endurecerse para las pymes Σ Aumentan en el último semestre las empresas con trabas para lograr financiación bancaria
Mientras que el crédito fluye a favor de las grandes compañías, las pequeñas y medianas empresas ven frenado su plan de crecimiento, o amenazada su supervivencia, porque cuando buscan una inyección económica se estampan contra un muro cada vez más infranqueable. El porcentaje de pymes que han tenido dificultades para acceder a financiación ha subido del 50,6 % en marzo pasado, al 74,4% en la actualidad. Así lo recoge el informe correspondiente al tercer trimestre de 2016 elaborado por las Sociedades de Garantía Recíproca Cesgar. Su presidente, José Rolando Álvarez Valbuena, advierte de que las expectativas son más bien pesimistas, pese a que, a la hora de conceder un préstamo, debería primar la viabilidad del negocio sobre los avales.
Aquellas pymes que aseguran que su principal obstáculo ha sido no haber podido aportar las garantías que se le exigían, representan un 48,7% de los casos, mientras que el coste del crédito ha pasado a ser un problema para el 28,8%, frente al 16,6% de primavera. Así las cosas, las pequeñas y mediadas empresas que consideran que las entidades financieras no comprenden su negocio suben del 4,1% al 12,6%.
«Parálisis política»
En este escenario, las perspectivas de las pymes a corto plazo empeoran con respecto a primavera, y retroceden a niveles de hace un año. Frente a lo registrado el pasado marzo, cuando la evolución de la facturación reflejaba una mejora económica de las compañías, ahora el número de negocios que confía en aumentar esa facturación ha caído seis puntos –del 46% al 40%–.
«Hemos sufrido una ralentización de la economía por la parálisis política y hemos retrocedido en cuanto a perspectivas empresariales al año pasado » , lamenta Álvarez Valbuena. A esta circunstancia se suma la creciente presión regulatoria. «La banca mantiene una posición restrictiva en la concesión de crédito por las exigencias del regulador», puesto que «al aumentar el rating de la cartera crediticia, hay pymes que quedan excluidas de la financiación». Y eso que las pequeñas y medianas empresas españolas «son solventes aunque no superen el sistema de rating de una máquina», en alusión a los bancos. Estos, según el presidente de Cesgar, «quieren dar crédito, viven de eso. No es problema de los bancos, es un problema derivado de la crisis financiera. El Banco Central Europeo les está pidiendo que aumenten el rating de su cartera crediticia».
Mientras que el 83,9% de las pymes que demandaron financiación bancaria en marzo pasado la obtuvieron, en septiembre solo ha sucedido así con el 71,3% de los casos. Unos datos que reflejan el empeoramiento en el resultado de las negociaciones de las empresas con las entidades, según las conclusiones del estudio. Aumenta, por tanto, la cantidad de negocios –28,7%– que no han conseguido crédito bancario, bien porque se lo han denegado – un 9,6%–; no han llegado a solicitarlo por diferentes motivos, como la previsión de denegación –10%–, o porque están a la espera de una respuesta –8,9%–. En resumidas cuentas, concluye el estudio, aquellas pequeñas y medianas empresas que logran financiación bancaria, lo hacen en peores condiciones que hace seis meses.
Por otra parte, un 19% de las pymes no consigue ningún tipo de financiación. Y un 17% de las que sí la logran, no obtiene el volumen que reclama. Resolución de las necesidades de financiación Nivel de utilización y valoración media de distintos instrumentos financieros
«España es un país muy bancarizado y la financiación está demasiado centralizada en los bancos», lamentó Álvarez Valbuena, quien recordó que las fuentes de crédito alternativas son aún testimoniales. El apoyo de provee- 8,8 dores y familiares suponen dos herramientas con las que la pyme española suple la falta de crédito bancario. De ahí, según el presidente de Cesgar, el papel fundamental de las 20 sociedades de garantías operativas en España.